Hallado el cadáver de una mujer con señales de violencia
El conductor de un camión que circulaba en dirección a un vertedero de Leganés descubrió ayer el cuerpo sin vida de Sandra U.J., de 26 años de edad. La mujer tenía rotas la primera y segunda cervicales y lesiones en la nuca, según el análisis del forense que le practicó la autopsia. A juzgar por este primer informe, alguien trató de estrangularla.La Jefatura Superior de Policía explicó que la víctima era una mujer drogodependiente, que ejercía la prostitución y con antecedentes policiales por robo. Sandra, separada y con un hijo, era natural de Madrid, aunque vivía en Fuenlabrada con sus padres.
El hallazgo tuvo lugar a las ocho de la mañana. El cuerpo de la mujer, vestida con un pantalón vaquero y unas zapatillas, se encontraba tendido en un camino polvoriento y desierto que conduce al vertedero de las Cárcavas, en el término municipal de Leganés. El sendero todavía pertenece al término municipal de Fuenlabrada y está situado a cien metros del final de la calle de Cuzco, en el parque municipal de la Pollina.
El camionero que descubrió el cadáver indicó que la mujer estaba tendida de costado con un golpe en la parte superior de la cabeza. Miguel, un jardinero municipal que trabajaba por la zona, añadió que la chica tenía manchas de sangre en la parte derecha de la cara. "Me acerqué al lugar del hallazgo cuando me dijeron que era una chica muerta, porque el día antes vi a dos chicos y a una mujer discutiendo por la zona", explicó el jardinero. Según su relato, la mujer iba bien vestida, "con unas zapatillas blancas, un pantalón vaquero y una camisa". La policía mantiene, en cambio, que la víctima estaba semidesnuda. Uno de los agentes indicó que "daba la impresión de que la mujer fue arrojada en el camino tras morir cuatro o cinco horas antes en otro sitio".
El camino de acceso al vertedero de las Cárcavas es muy frecuentado por los vecinos de Fuenlabrada. "Ésta es una zona tranquila y muy segura", dijo uno de los vecinos de la zona, sorprendido por el descubrimiento del cadáver.
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