Los abogados de Barcelona serán los primeros de España en anunciar sus servicios sin limitaciones

Los abogados de Barcelona discutirán el próximo martes una propuesta de la Junta del Colegio por la que se liberaliza totalmente la publicidad de este colectivo, de forma que podrán ofrecer sus servicios a los ciudadanos sin otras limitaciones que las que fijan la Ley de la Competencia Desleal, la Ley General de Publicidad y las normas deontológicas de la profesión. El reglamento que se discutirá es el primero de este tipo que se elabora en España tras la liberalización de los colegios profesionales, según el decano de los abogados de Barcelona, Jaume Alonso-Cuevillas.

En el caso más que probable de que se apruebe, el reglamento de publicidad entrará en vigor al día siguiente, 22 de julio, y los abogados de Barcelona ya podrán anunciarse en la forma que crean más conveniente, siempre que respeten ciertas normas deontológicas como, por ejemplo, no prometer al cliente una resolución judicial cuando no dependa exclusivamente del letrado. Tampoco podrán realizar publicidad dirigida a las víctimas o a los familiares de accidentes de tráfico o catástrofes. Un grupo de 10 abogados propondrá a la asamblea que se elimine la prohibición de que la publicidad aluda al coste de los servicios que se contraten y la que impide que los anuncios tengan elementos persuasivos, como propone la junta. Otros abogados, entre los que se encuentran algunos ex miembros de la junta de Eugeni Gay, anterior decano y actual presidente del Consejo General de la Abogacía, consideran que el reglamento es ilegal. En su opinión, un colegio profesional no puede establecer sanciones al margen de las fijadas en el ámbito de España y Cataluña. Por eso solicitarán la retirada del reglamento, por lo que se puede prever que se reproduzcan las diferencias que afloraron hace siete meses, cuando se aprobó una derrama para costear el déficit que, según la junta entrante, había dejado Gay. En la primera propuesta de reglamento se establecía que la publicidad de los colegiados debía ser autorizada por una comisión, pero la redacción final sólo prevé, si se quiere, que se consulte a la comisión de publicidad la licitud del anuncio. El reglamento cambiará notablemente las restricciones actuales que impiden a los abogados, por ejemplo, colocar una placa en la puerta de su despacho superior a un cierto tamaño o anunciarse en las páginas amarillas de la guía telefónica. Alonso-Cuevillas explicó ayer que por el incumplimiento de alguna de estas limitaciones se llegaron a tramitar expedientes sancionadores. "Es absurdo mantener un reglamento que en la práctica no se aplica", dijo. En su opinión, el nuevo reglamento de publicidad responde al cumplimiento de la ley de liberalización de los colegios profesionales, pero existen también otras justificaciones. "Los abogados ya no estamos solos, sino que tenemos auditores, gestores y economistas que compiten con nosotros sin nuestras limitaciones", agregó. Congreso en 1999 El decano del Colegio de Abogados de Barcelona también explicó ayer que en octubre de 1999 se celebrará en Tarragona un congreso de los letrados de Cataluña del que saldrán las bases para redactar un estatuto de la abogacía catalana. Posteriormente se creará una comisión para redactarlo y el estatuto deberá ser aprobado por el Departamento de Justicia. El congreso ha sido convocado por los 14 colegios de abogados de Cataluña y, según el decano, "no se trata de una escisión de la abogacía española, sino sólo de una autorregulación".