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FRANCIA 98

Vogts contra el pulso de Suker

Alemania y Croacia se la juegan para vérselas con Francia

Àngels Piñol

La máquina alemana de siempre contra la sorpresa croata. Un triple campeón del mundo ante una selección que debuta en un Mundial. Alemania y Croacia se juegan en Lyón (21.00 horas) un pase a la semifinal. Pese a que no esté jugando bien, pese a que no encuentre a un conductor de equipo, pese a que estuvo a punto de quedar eliminada ante México, casi nadie duda en Alemania de que esta noche seguirá con vida en Francia. Tanto es así, que Miroslav Blazevic, el técnico croata, ha puesto el grito en el cielo ante tanto desprecio por su equipo desde un país tradicionalmente amigo. Blazevic también tiene sus bazas: que Suker siga inspirado ante puerta y que Alemania acabe de pagar caro su constante flirteo con el vértigo.Vogts ha sufrido innumerables problemas en este Mundial para encontrar un director en el césped. No ha cesado de hacer pruebas, sin éxito. Ése es el problema: cuenta con una sólida defensa y con un ataque demoledor formado por Bierhoff, el pichichi del calcio fichado por el Milan, y Klinsmann, un talismán ante puerta. Pero es una selección fracturada. Vogts ha tenido que recurrir a Matthäus, el símbolo de la vieja escuela alemana para asentar al equipo. Alemania venció a Estados Unidos e Irán por 2-0, arrancó un empate a Yugoslavia en al final del partido (2-2). Fue en su último encuentro ante México cuando su situación crítica se agravó al clasificarse en el último suspiro. Su fuerza física y mental le han bastado para seguir viva. Alemania saca entonces todo su poder. Da más miedo cuando pierde que cuando gana.

No son sólo de corte futbolístico los quebraderos de cabeza de Vogts. El caso de Andreas Möller, líder del Borussia Dortmund, refleja que el vestuario también desafina. No se toleran en un grupo tan granítico muestras de debilidad en una de las estrellas de la Bundesliga. Cuestionado por Vogts, Möller no ha acabado de funcionar como cerebro. "Unos se quejan del frío, otros del calor y él se queja de todo", dijo el técnico. El conflicto estalló el pasado jueves cuando Michaela, la mujer de Möller, de vacaciones en la Costa Azul, irrumpió en el hotel de concentración de Alemania en Toulon para pedir a su marido que abandonara la selección. El diario Bild Zeitung había publicado que el día de México escuchó como los suplentes llamaban a su marido "llorón" y "quejica". Möller acabó por atribuir la reacción de su mujer a una confusión, pero su situación es muy delicada. Todo indica que acabará renunciando cuando acabe su andadura en Francia.

Ante un grupo tan rocoso, Croacia presenta su primer éxito en un Mundial. Aliado tradicional de Alemania, quieren vencer a sus amigos para empezar a hacer "historia". Blazevic cuenta para ello con uno de los centros del campo más esplendorosos: Boban ocupa la posición de medio centro y Jarni, Prosinecki y Asanovic completan la medular. No tuvo más remedio el seleccionador que alterar la alineación: tanto talento olvidaba los marcajes. Blazevic dispone de Suker, en estado de gracia, que ha logrado tres goles. Tras su temporada irregular en el Real Madrid, Suker ha conseguido resarcirse en Francia y dar lo mejor de sí mismo. De su inspiración dependen muchas de las posibilidades de Alemania. No fue gratuito el gesto del madridista en el último partido ante Rumanía: antes de lanzar el penalti decisivo comprobó sus pulsaciones. Le convencieron, chutó y marcó. Croacia vivirá de los latidos de Suker y Alemania de los de Klinsmann. Un hombre poco querido por la afición desde que salió en defensa de los homosexuales y de su amigo Boris Becker tras los problemas racistas que sufrió por estar casado con una mujer mulata.

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