El fiscal califica de "cínico y amoral" al presunto parricida de Minas de Riotinto

El juicio contra Sergio Bermejo Vázquez, el presunto autor del doble crimen contra sus padres en Minas de Riotinto (Huelva), quedó a última hora de ayer visto para sentencia, tras el análisis de los informes periciales y la exposición de conclusiones de fiscalía, acusación particular y defensa. El fiscal, Serafín García, solicitó al jurado popular, compuesto por tres mujeres y seis hombres, "un veredicto de culpabilidad" para el joven de 18 años, al que definió como "una persona amoral y cínica que ha mantenido una actitud de frialdad durante todo el proceso". Las acusaciones piden penas de 13 años de prisión para Bermejo por cada uno de los delitos, cometidos el 4 de marzo de 1997. Bermejo está acusado de haber acabado supuestamente con la vida de sus progenitores disparándoles a bocajarro con una escopeta semiautomática de caza y rematándoles después con un machete y un objeto punzante. Durante la vista declararon los amigos del inculpado, que aseguraron haber permanecido con Sergio Bermejo entre las 12.00 y 12.30 del día de los hechos. El doble crimen se cometió entre el mediodía y las 14.00, por lo que el acusado estuvo con sus padres durante casi una hora y media, según el fiscal, que subraya que todas las pruebas "demuestran la culpabilidad" del joven. Los momentos de mayor tensión se vivieron en la sala cuando se visionaron 43 fotos y tres vídeos de la investigación. Bermejo permaneció atento a la televisión, muy serio, hasta que aparecieron los cadáveres de sus padres cubiertos de sangre. Entonces agachó la cabeza. La defensa se reafirmó en la inocencia de su patrocinado, que aguardará el veredicto en la prisión de Huelva.