El pop regresa a Benicàssim

La lluvia fue la culpable, el pasado año, de que más de 15.000 jóvenes tuvieran que despedirse del Festival Internacional de Música Independiente de Benicàssim (Castellón) varias horas antes de lo previsto. Y, lo que es peor, sin poder disfrutar de los conciertos de algunas de las bandas (Pavement, Blur o Luna) más interesantes del cartel. El público merecía una recompensa y, quizá por eso, los organizadores del evento han querido que el Benicàssim"98 sea capaz de superar hasta las expectativas de los aficionados más exigentes. La principal novedad es, sin duda, el cambio en la ubicación del recinto donde, del 7 al 9 de agosto, se celebrarán las más de 60 actuaciones, entre músicos y disc-jockeys, programadas. "El Velódromo se nos ha quedado pequeño. Necesitábamos un espacio que nos permitiera instalar un chill out (zona de descanso) o una carpa de baile más grandes y en el que la gente pudiera estar a gusto sin ahogos ni incomodidades. Este año van a salir 25.000 entradas a la venta y esperamos llegar a esa cifra de asistentes", explica Miguel Morán, gerente de la sala madrileña Maravillas y responsable del festival. El retraso en el inicio de las obras de acondicionamiento del nuevo recinto, de 100.000 metros cuadrados, ha motivado las primeras polémicas y la aparición de algunos rumores que Morán desmiente categóricamente. "En este tema hay muchos intereses políticos. El partido que gobierna en Benicàssim (PP) carece de mayoría y no consigue ponerse de acuerdo con el resto de opciones políticas en el Ayuntamiento. De todos modos, en ningún momento nos hemos planteado que no pueda celebrarse este año el festival", señala. También la calidad del cartel ha mejorado considerablemente. Björk, Sonic Youth, P. J. Harvey o Bernard Butler son algunos de los nombres más destacados que participarán en Benicàssim"98. Además, el día 6 se ofrecerá una fiesta de bienvenida con las actuaciones de Jack, Sr. Chinarro, Tedium y Françoise Breutz. El menú se completa con la realización de tres cursos de verano (en colaboración con la Universitat Jaume I), pases de moda y espectáculos teatrales. En el capítulo relativo a la música de baile figuran artistas como Lionrock, Goldie o Ian Pooley. Tras el éxito de la música electrónica en anteriores ediciones, Morán apunta que se ha decidido ampliar la carpa dance e incluso se permite hablar de un festival paralelo al del escenario principal: "Si sacáramos todos estos grupos del cartel podríamos hacer un festival de música electrónica excelente. Pero al público de Benicàssim le gusta tanto el pop como el dance y nosotros queremos ofrecerles las dos cosas". El presupuesto que barajan los organizadores ronda los 300 millones de pesetas. "Cada vez que planteamos el tema de las subvenciones a los organismos públicos surgen problemas. Si no se soluciona llegará un momento en el que tendremos que irnos de Benicàssim. Pero que quede claro: no nos apetecería tenernos que marchar de allí. Y no somos los únicos que pensamos así: la Diputación de Castellón se ha volcado para que el festival continúe celebrándose en Benicàssim", afirma Morán. Por primera vez, dos formaciones valencianas, Polar y La Habitación Roja, han sido seleccionadas para participar en el evento. "Es una buena oportunidad para que la gente se dé cuenta de que en Valencia estamos viviendo un momento de agitación cultural, no sólo músical, muy importante. Además, el público potencial de ambas bandas es el que suele acudir cada año a Benicàssim", explica Paco Grande, bajista de Polar. Los responsables del festival no desean perder la oportunidad de contribuir "al despegue de la escena pop valenciana. Las cosas están cambiando y nos apetece mucho poder apoyar, desde esta plataforma, a bandas como La Habitación Roja o Polar con las que tenemos muchas afinidades", concluye Morán.