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Entrevista:

"Si una canción me llega al corazón, me da igual su autor"

Aunque nacida en Madrid (1968) siempre fue de Andalucía, la tierra de sus padres -él, sevillano, compadre de Morente y amante del flamenco, ella de Huelva- a donde viajaba de chica saludando el paso por Despeñaperros en automóvil cantando Andaluces de Jaén. Hoy Clara Montes, tras haberse doctorado en flamenco en locales de Madrid y acompañar durante tres años a Amancio Prada en la gira de Emboscados, presenta su primer disco Clara Montes. Canta a Antonio Gala (EMI-Hispavox, 1998), una joya privada producida por Rosa León donde algunos de los más importantes compositores españoles del momento musican poemas de amor de Antonio Gala. Pregunta. Vaya lista de padrinos: Rosa León, Gala, Arturo Pareja Obregón, Rosana, Pedro Guerra, Antonio Vega... Respuesta. Ese amparo es engañoso: el disco lo compra el que le gusta lo que va a escuchar. No es el primer disco de poetas famosos que no se ha vendido. Lo malo será sacar las letras para el siguiente. P. En pleno año Lorca apuesta por poemas de Gala. R. Elegí a Antonio porque ademas de tener debilidad por lo que escribe. A veces he leído artículos y he pensado, esto mismo habría escrito yo de mí si supiese hacerlo. Fue muy amigo de mi padre. Es una elección entrañable. P. Ha pasado de ser emboscada y privada con Amancio Prada a sentir de pronto los focos encima. R. Da un poquito de cosa, pero llevo tantos años en esto que ya sé los pasos que he dado y los que quiero dar. Las personas siempre estamos en la búsqueda. No sé si con este disco saldré del bosque. P. Usted empezó cantando flamenco R. Mi padre fue el que me enseñó. De chica, como era tan tímida, me expresaba cantando. En el disco he tenido que aguantar el nervio y el impulso, porque el cuerpo me pedía más y Rosa León me controlaba. P. Ella se ha volcado con usted. ¿Qué le ha enseñado? R. Es un lujo. Me ha prestado 20 años de experiencia como cantante, de relaciones con casas de discos, de soportar cómo un arreglista le arruinaba una canción. Y me ha enseñado a ser más paciente. P. Dice reivindicarse como intérprete frente a tonadilleras-autoras. R. Yo compongo y hago canciones, pero si una letra o una canción me llega al corazón me da igual quién la escriba. La hago mía igual. P. En el mercado discográfico hay que hacer mucho ruido para llamar la atención. Este disco no está precisamente lleno de ruidos. R. Con poesías de amor y desamor qué vas a hacer. No me fijado en el mercado. Me he puesto al servicio de las canciones intentando hacer algo de lo que me sienta orgullosa.

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