Fútbol en una ciudad tomada
Inglaterra y Rumania prometen buen juego para olvidar a los "hoolingans"
Pese a todo lo bueno que Inglaterra mostró en su debú (2-0 a Túnez), es decir, pese a las promesas futbolísticas que la presencia de un Paul Scholes en plan maestro pueda generar, en Toulouse no están muy contentos. La devastación hooligan del pasado fin de semana en Marsella ha generado tal psicosis de falta de seguridad que los habitantes y negociantes de la capital del sur llevan un par de días soportando un régimen militar con toque de queda incluido. Invadidos por policías y fotógrafos en busca de un pulitzer, con restricciones en el horario de cierre de bares y cafeterías, prohibición de juntarse más de 200 personas en parques y plazas, suspensión de la fiesta de la música... a los ciudadanos, sólo les queda protestar.Mientras tanto, Hoddle, sigue en sus trece: decidió que Gascoigne desestabilizaba el equipo y no lo llevó a Francia; que Beckham, el deseado, no tenía sitio en su sistema y le mantiene en el banquillo. Anunció que sería el Mundial de Shearer, y ese camino lleva; anunció que Scholes llevaría todo el peso, y por ahí va la cosa.
"Rumania es favorita. Sus jugadores tienen más experiencia mundialista que los nuestros y además son muy buenos técnicamente", dijo. Ambas selecciones se juegan el primer puesto.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.