Encierro vecinal en Alfafar para reclamar que se entierren las vías

El Ayuntamiento de Alfafar (L"Horta Sud) se convirtió anoche, literalmente, en la casa del pueblo. Decenas de vecinos pasaron toda la noche encerrados en el Consistorio para exigir que se entierren las vías del acceso ferroviario a Valencia por el sur, que cruzan la población. Los más de 40.000 vecinos de Alfafar, Sedaví y Benetússer, el llamado "triángulo del mueble", sufren a diario el paso de cerca de 400 convoyes ferroviarios, unos 16 trenes por hora. "Estamos acostumbrados a ver pasar cinco o seis trenes antes de que se suban las barreras", explica Gloria Costa, de la Plataforma Pro Soterrament de les Víes. La plataforma lleva 20 años reclamando el enterramiento de estas vías que aíslan a las tres localidades y que entre 1991 y 1997 se han cobrado al menos la vida de 67 personas, arrolladas por los trenes. "Los pasos subterráneos no sirven porque se inundan cuando llueve y ahora sufrimos el paso diario de cuatro Euromed", apostilla Costa. Los vecinos reclaman al presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, que cumpla la promesa de enterrar las vías que formuló en el mitin electoral de 1995. Sus quejas se las trasladarán el 16 de junio al director general de Transportes, Vicente Dómine.