Tres accidentes mortales en carreteras que esperan mejoras

Tres personas resultaron muertas ayer en las carreteras de la región. El primero de los accidentes ocurrió en la M-505, vía que une Las Rozas con El Escorial. Poco antes de las ocho de la mañana, un turismo y una furgoneta chocaron frontalmente. Manuel A. L. R., de 30 años, conductor del automóvil, quedó atrapado entre los hierros, y antes de que los bomberos pudieran rescatarlo, falleció, informa Luis Fernando Durán. Hora y media después, un conductor de 41 años perdía la vida en el kilómetro 42 de la M-607, carretera que atraviesa el parque regional del Manzanares. El accidente se produjo, según Europa Press, cuando el conductor perdió el control de su todoterreno en una curva mojada y se salió de la vía. El impacto le provocó un traumatismo craneoencefálico. La víctima fue traslada, aún con vida, por el servicio de emergencias de la Comunidad al hospital Doce de Octubre, donde murió. En agosto de 1997, un padre y sus tres hijas fallecieron también en un accidente ocurrido en esta misma curva. Por la tarde, el conductor de un turismo que transitaba por la M-601, en Navacerrada, estrelló su coche contra un quitamiedos. El hombre, un cabo de 23 años, salió despedido y se seccionó el cuello con la barra metálica de protección de la carretera, según el Insalud, informa Efe.

Tres desdoblamientos fallidos

Casualmente, sobre las tres carreteras donde se produjeron ayer los siniestros han sobrevolado durante años los proyectos de ampliación de sus calzadas. Ninguno ha salido adelante.Los alcaldes de los municipios adyacentes a la M-607 (entre Colmenar Viejo y Cerceda) siempre han reclamado el desdoblamiento de esta vía, algo a lo que se oponen ecologistas y Consejería de Medio Ambiente. Sin embargo, en una reciente reunión de los máximos responsables de esta zona natural se acordó permitir su ensanchamiento (de 9 a 14 metros), pero no su desdoblamiento, tal y como proponía la Consejería de Obras Públicas. Las obras aún no han comenzado.

El desdoblamiento de la M-505 también estuvo durante un tiempo en el punto de mira de la Consejería de Obras Públicas. Se pretendía mejorar las comunicaciones entre Madrid y El Escorial. Sin embargo, al atravesar zonas de gran valor ecológico (fresnedas y encinares, principalmente), Obras Públicas desechó el proyecto. Se propuso entonces, como alternativa, convertir en autovía la M-600, carretera que enlaza El Escorial y la N-VI. Este desdoblamiento también fue paralizado por cruzar zonas de gran valor ecológico.

La M-601, vía que lleva desde la N-VI hasta el puerto de Navacerrada, tuvo durante un tiempo también sus planes de ensanche debido a los importantes atascos que se producen durante la temporada de esquí. La importancia de los pinares que cruza obligó a archivar el proyecto.