ZARAGOZANOS AGRADECIDOS

La Diputación Provincial de Zaragoza y el Ayuntamiento de Calatayud han recibido, entre sorprendidos y encantados, dos legados que les convierten en herederos universales de dos fortunas bien diferentes. Joaquina Zamora, una pintora zaragozana que hoy cumple 100 años, hizo ayer público su testamento, en el que deja a la institución provincial todos sus bienes. La condición, que instituya un premio de pintura y escultura que lleve su nombre y que se concederá cada dos años. La pintora, discípula de Julio Romero de Torres, dejó de pintar hace años y fue recuperada en 1996 por la Diputación, que organizó una antológica de su obra. Joaquina quiere así agradecer a esta institución la beca que le dio, cuando tenía 24 años, para estudiar en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando. El regalo que recibirá Joaquina por su cumpleaños será la medalla de oro de Santa Isabel y una página en Internet que difundirá su biografía. Otro jubilado, sin herederos, José Pablo García García, que murió el pasado mes de marzo a los 82 años, ha dejado todos sus bienes al Ayuntamiento de Calatayud. El alcalde, Fernando Martín, ha comenzado una investigación por todos los registros de la propiedad de España para saber si Pepito el Soguero, co nocido así por su negocio de cordelería, tiene más fortuna que los 100 millones que ya han sido inventariados. En este caso, el Ayuntamiento de su ciudad aguarda los trámites para poder enterrarle en Calatayud con todos los honores y agradecerle su gesto.