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Campeones a los 19

Mábel Galaz

Han hecho suya la obsesión del madridismo por ganar una Copa de Europa 32 años después. Pero ellos ya saben lo que es eso. Con sólo 19 años, Christian Panucci y Clarence Seedorf fueron campeones, un título que muchos grandes jugadores no han logrado nunca y que ellos tienen la oportunidad de repetir. Para Panucci, la de Amsterdam será su tercera final. Para Seedorf, la segunda. "Gané una, perdí otra y ahora me toca ganar", calcula el italiano, campeón con el Milan de Capello ante el Barça de Cruyff. "Quiero volver a sentir algo como aquello", sueña Seedorf al recordar la final que ganó al Milan con Panucci en el equipo rival."Recuerdo muchas cosas de aquella final de Atenas. Tenía sólo 19 años y la temporada anterior era un chaval que jugaba en los juveniles del Génova", rememora Panucci. "Fue la noche más bonita de mi vida. Recuerdo que me fui solo por Atenas a las cinco de la madrugada. Estaba medio borracho. No me emborracho nunca, pero ese día lo estaba. Tenía muchas ganas de pasarlo bien con mis compañeros. Pero avanzada la noche me encontré solo en una discoteca y decidí marcharme a pasear por la ciudad y a pensar en todo lo que me había pasado ese día". Panucci sonríe cuando relata aquel día del que sólo cuenta una parte.

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"Cuando levanté la Copa de Europa sentí algo increíble. Profesionalmente es un sueño para todos los futbolistas lograr algo así. Ahora que tengo la posibilidad de volver a ganar la Copa de Europa llevó mucho tiempo pensando en ello. Es como una película. Lo primero que hago cuando me levanto es coger mi móvil y encenderlo. En el saludo inicial aparece: `Amsterdam, 20 de Maggio". Puse el mensaje después del partido de Dortmund. Lo tenía decidido hace tiempo pero soy tan supersticioso que no quería hacerlo antes de tener asegurada la final". El móvil de Panucci se enciende y suena una música alegre acompañada de la consigna que preside cada día hasta la final.

"El partido de Amsterdam es ya para mí como una película. Veo que va a ser un partido muy difícil en que vamos a luchar mucho y que se va a resolver en la prórroga. Luego habrá una gran fiesta: vamos a subir a la tribuna a levantar la Copa y a divertirnos mucho. Muchas veces sueño con cosas así, y luego se han convertido en realidad". Panucci presume de pitoniso aunque también reconoce que en sus vaticinios hay algo que tiene que ver con la fe ciega que todos los campeones tienen a la hora de los grandes retos.

"Para ganar a la Juve tenemos que sacrificarnos mucho, algo que no hemos hecho todos durante la temporada. Tenemos que sacar todo lo que llevamos dentro. Luchar por llegar los primeros al balón. Yo creo que este equipo está hecho para ganar, para llegar primero, cuando se trata de ser segundos parece que las cosas no salen. Todos los jugadores somos ganadores. La culpa es nuestra, no del entrenador o de la táctica. Ahora tenemos por delante 90 minutos para olvidar toda la temporada". Panucci conoce a la Juve mejor que nadie. "Llevo dos años aquí y casi sé lo mismo que todos. Tácticamente hay que trabajar mucho", advierte, "porque la Juve es un equipo muy organizado. Pero creo que, cuando luchamos, cuando queremos ganar, nosotros somos capaces de superar todos los problemas tácticos que nos podamos encontrar. La Juve es un equipo, como todos los italianos, que siempre lucha al máximo, que nunca se rinde. Confío mucho en mis compañeros para parar a Inzaghi; en el centro del campo tienen mucha agresividad, pero atrás creo que son más débiles y con la calidad que tenemos nosotros les podemos hacer daño".

Clarence Seedorf había celebrado su 19 cumpleaños un mes antes de ganar su primera Copa de Europa. "Todos los jugadores soñamos con llegar a una final y ganarla, aunque sea a los 32 años. Yo tuve suerte y la gané a los 19 y eso me da más oportunidades de volver a intentarlo. Recuerdo que me emocioné mucho. Ya desde que me desperté, noté todo muy raro, me sentía de una manera especial. Siendo tan jóvenes, Kluivert y yo lo vivimos de una forma distinta, como en una nube, no nos enterábamos de la mitad de las cosas". Seedorf ha hablado muchas veces de ese partido con Panucci. "Reconozco que el Milan jugó mejor la primera parte, pero la segunda fue nuestra. Marcamos y sentí una emoción increíble. Yo me sentí muy partícipe de esa Copa de Europa porque jugué desde el principio. Hay que pasar por ello para saber lo especial que es un momento como ése".

Tiene la final en vídeo, pero hace tiempo que no la ve. Y menos ahora. "Tengo otras cosas en la cabeza. Sólo pienso en el presente, en la Juve. Sé la obsesión que la gente tiene aquí por ganar otra vez la Copa de Europa. Estoy convencido de que vamos a lograrlo, aunque tengo mucho respeto por un rival que ha llegado tres veces a la final. Pase lo que pase, vamos a salir con la cabeza muy alta. Si nos colocamos bien en el campo, hacemos las cosas como debemos, la Juve lo va tener muy difícil". Panucci ha hablado con Seedorf y con otros compañeros del Real Madrid de una idea que le ronda la cabeza desde hace tiempo:" Quiero dar un buena parte de mi prima a niños sin padres. Lo he hablado con muchos de mis compañeros. El año pasado ya lo hicimos"

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Sobre la firma

Mábel Galaz
Fue la primera mujer en pertenecer a la sección de Deportes de EL PAÍS. Luego hizo información de Madrid y Cultura. Impulsó la creación de las páginas de Gente y Estilo. Ha colaborado con varias cadenas de televisión y con la Cadena Ser. Ahora escribe en El País Semanal.

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