Utah y Chicago toman ventaja
Para empezar, 37 puntos de diferencia (112-77). Lo de los Jazz no fue simplemente una victoria. Utah aplastó a los Lakers de tal forma que, a pesar de tratarse de un solo encuentro, ha sido suficiente para volver a poner en duda la capacidad de O"Neal y compañía en grandes empresas. Apoyados en un comportamiento estelar de dos hombres de banquillo, el base Eisley y el veterano Chris Morris, Utah pasó por encima de los Lakers hasta reducirlos a un equipo menor.El partido saltó en pedazos en la primera parte. Greg Foster se impuso a O"Neal hasta dejarlo inoperante en los dos primeros cuartos. Es más, le sacó de sus casillas y terminó enfrascado en una discusión no exenta de insultos con Foster. Resultado: Foster, cuatro puntos en el primer cuarto, O"Neal, cero.
La salida de los dos primeros reservas en la rotación de Utah, Eisley y Morris, supuso una revolución. 14 puntos del base y 10 del alero colocaron el marcador en un increíble 53-26 a falta de 4 minutos para el descanso. El chaparrón parecía no tener fin y los Lakers mostraban todos esos defectos que ponen en duda su capacidad para ser campeón. Ataque errático, falta de sintonía entre sus jugadores exteriores y O"Neal chocando una y otra vez con su demonio, los tiros libres (7 de 16). Una jugada de Malone al inicio del tercer cuarto colocó un marcador escandaloso (66-35). El resto no valió para casi nada. Los Lakers llegaron a maquillar por momentos el resultado, pero Utah quería sangre, y no paró hasta convertir la victoria en una humillación. Malone llegó a sus números habituales (29 puntos, 10 rebotes), 7 jugadores de Utah lograron dobles figuras en anotación y los suplentes marcaron las diferencias (53 puntos por 27 los de los Lakers).
Por su parte Chicago se anoto el primer encuentro de su serie frente a Indiana (85-79) gracias a que fueron capaces de sobreponerse a una primera parte negada de cara a la canasta de sus tres mejores anotadores: Jordan, Pippen y Kukoc, que sólo lograron 3 canastas de 24 intentos. La segunda parte fue diferente, sobre todo en lo que concierne a Jordan que se fue hasta los 31 puntos, 25 de ellos en esta mitad.
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