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El Tau deja al Barcelona contra las cuerdas

El equipo de Vitoria se acerca a la final de la Liga ACB

El balón lanzado por Bennett boto dos veces en el aro antes de entrar coincidiendo con la bocina que anunciaba el final del partido. Esta resolución hizo honor al jugador más decisivo de un encuentro que ha colocado al Barcelona en una posición desesperada, necesitado ya de una auténtica proeza para no quedarse en el camino.Todo son malas noticias para el actual campeón. No sólo por el marcador global, sino porque no ha mostrado a lo largo de dos partidos superioridad alguna en las facetas importantes del juego.

Ayer hizo un buen partido, defendió con mucha mayor intensidad que el jueves, logró dejar en su mínima expresión a las dos armas letales del Tau, Beric y Espil y contó con la ventaja de los muchos minutos en el banco de Burke, con problemas de faltas. Pero ni por esas.

La causa principal hay que buscarla en el base norteamericano del Tau. No sólo por la última y decisiva canasta, sino porque es el director del mejor ataque estático de la liga, a bastante distancia del resto.

Bennet controla y mueve a la perfección la pelota, que circula a buen ritmo y es siempre manejada por buenos pasadores, tanto exteriores como interiores. La juegan con gran paciencia y cuando los primeros intentos no funcionan, buscan un buen aclarado para un pívot o el dan espacio a Benett para que lance, penetre a canasta o de una asistencia a pívot o tirador de tres, que de todo cuenta en su equipo. Esta circunstancia se repitió una y otra vez con éxito por parte del Tau, lo que limitó los efectos de una buena defensa barcelonista.

Después del pequeño desengaño que supuso el primer encuentro, el de ayer recuperó aromas auténticos de playoff. Se luchó metro a metro, hubo pequeños roces y los árbitros pusieron a prueba la paciencia de todos con su excesiva meticulosidad.

Como resultado el partido fue tan pasional como trabado y lleno de interrupciones. El Tau mando casi siempre hasta llevar al Barcelona a una situación límite (57-45 minuto 28). Entonces surgió la figura de Esteller, que se cargó a su equipo en la espalda y a base de furiosas penetraciones dejo la resolución en suspenso (64-65 minuto 34).

Era la hora de las estrellas y la mas reluciente se llamaba Bennett. Con siete segundos y empate a 74 hizo lo mismo que 10, 15 veces antes. Le dieron metros, la botó varias veces, se metió a unos 4 metros del aro y puso la semifinal a tiro.

Madrid-TDK

Real Madrid-TDK (19.00 horas)se enfrentarán hoy en el segundo partido de la otra semifinal que se disputará en el Palacio de la Comunidad de Madrid. En el primer encuentro el equipo de Manresa ganó a los madrileños.Por otro lado, el Ourense perdió ayer la categoría al ser derrotado por el Cáceres 77-81.

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