Francia crea un nuevo impuesto que grava las viviendas vacías

La Asamblea Nacional francesa aprobó ayer la creación de un nuevo impuesto o gravamen sobre los pisos vacíos en ciudades de más de 200.000 habitantes. La medida pretende sanear el mercado y evitar la especulación de los grandes grupos que, para evitar la caída de los precios, mantienen en reserva una parte importante del parque de viviendas.Se calcula que en Francia hay unos 2.200.000 pisos sin ocupar y, en el caso de París, se estima que entre un 8% y un 10% de las viviendas están vacías, cuando ya un 15% se ha convertido en segunda residencia. "Todo esto tiene consecuencias muy negativas para las escuelas o comercios de barrio", dijo Louis Besson, secretario de Estado de la Vivienda.

Los diputados votaron una medida por la cual el propietario de un piso, en el caso de que opte por mantenerlo vacío más de dos años, deberá abonar una tasa equivalente al 10% del precio de alquiler, según precios de mercado. Si el propietario sigue renunciando a alquilarlo, el impuesto subirá de año en año, a un 12,5% y luego a un 15%.

"Se trata de un claro ejemplo de totalitarismo fiscal", asegura la derecha, que critica el "poder inquisitorial" del Gobierno y unas medidas "que tendrán un efecto psicológico muy lamentable para los propietarios". Los gaullistas, liberales y centristas se han erigido en portavoces de los pequeños propietarios que no tienen suficiente dinero para rehabilitar viejos pisos y que necesitan ahorrar varios años para hacerlo y poder volverlos a poner en el mercado.

La propuesta de hacer extensiva la ley a todo el territorio francés, defendida por otros diputados socialistas, no fue asumida por la totalidad de la izquierda, que estimó que en las ciudades de menos de 200.000 habitantes y en poblaciones con estancamiento o regresión demográfica no pueden aplicarse los mismos criterios. Un informe previo, discutido en el Parlamento, explica que hay en Francia alrededor de 200.000 personas que carecen de domicilio y calcula que otros dos millones habitan en viviendas que no reúnen condiciones.