_
_
_
_

Un niño de 14 años muere electrocutado en una nave abandonada de Cornellà

Dejadez o temeridad. Un niño de 14 años murió electrocutado el pasado martes en una nave semiabandonada que la empresa Siemens tiene en el barrio Padró de Cornellà, junto al límite municipal de Sant Joan Despí. Las circunstancias de la muerte del chico han comportado que un juzgado de la ciudad haya decidido iniciar una investigación sobre el suceso. El sindicato Confederación General del Trabajo (CGT) acusó ayer a la empresa de negligencia.

Los hechos ocurrieron en la tarde del día 5, aunque no se supieron hasta ayer. Jesús B. L., que vivía en la calle de Frederic Soler, del barrio de La Gavarra, estaba jugando con unos amigos y decidieron entrar en la nave abandonada de Siemens a través de un agujero que había en la valla. La nave está situada junto a la factoría y las oficinas de la empresa. Una vez en el interior, Jesús se metió en un armario que contenía aparatos y sistemas eléctricos y debió de tocar algún cable que originó una descarga fulminante. La puerta del armario, cuya peligrosidad estaba señalizada, estaba forzada. Una de las indagaciones que deberá realizar el juzgado que ha asumido el caso será determinar si la puerta fue forzada por el adolescente o ya lo estaba antes de que él llegara. La multinacional alemana aseguró ayer que desconocía la existencia de un agujero en la valla, negó cualquier responsabilidad en el suceso y recordó que los jóvenes entraron sin permiso en una propiedad privada. Por su parte, el sindicato CGT culpó a la empresa de lo ocurrido y exigió que "se depuren responsabilidades". El sindicato condenó "la manifiesta negligencia" de la empresa "en el mantenimiento de sus instalaciones y vigilancia, dado el peligro que entrañan". En opinión de la CGT "el ahorro de puestos de trabajo de vigilancia y mantenimiento puede ser un factor importante en este caso". Unas 500 personas asistieron al entierro del chico ayer por la mañana, entre ellos alumnos y profesores del colegio Esteve Terrades, donde estudiaba. La familia no disponía de recursos económicos para pagar el entierro, por lo que el Ayuntamiento decidió hacerse cargo del mismo. Al final, no fue necesario pues la empresa Siemens decidió costearlo. La familia estudia presentar una querella.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_