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La mitad de los telespectadores catalanes siguieron el capítulo final de "Nissaga"

La mitad de los telespectadores catalanes siguieron el domingo por la noche el desenlace de Nissaga de poder. Un total de 2.239.000 personas conectaron en algún momento de la emisión con TV-3 para ver el final del serial, que sólo en Cataluña congregó ante el televisor a 1.491.000 fieles de media, según Sofres AM. Esta audiencia corresponde a un 51,1% de cuota de pantalla -porcentaje del público que está viendo la televisión al tiempo-. El episodio, sin embargo, no satisfizo las expectativas de muchos telespectadores, que se confesaron defraudados.

El último capítulo del serial más largo de la historia de TV-3 se convirtió el domingo en un acontecimiento televisivo equiparable a una final de fútbol con participación del Barça. Por poner un ejemplo reciente, la final de la Copa del Rey jugada el pasado miércoles entre el equipo catalán y el Mallorca reunió ante la pequeña pantalla a 1.512.000 telespectadores de promedio. En el caso de Nissaga, fueron 1.580.000, incluyendo las personas que quisieron despedirse de Mateu y Eulàlia Montsolís desde Baleares, Valencia y la Franja. Esta cifra dobla la del episodio más visto hasta ahora, en enero del año pasado, el correspondiente a la lectura del testamento de Mateu cuando todo el mundo lo creía muerto. La audiencia máxima del capítulo del domingo -y, por lo tanto, de todo el culebrón- se produjo a las 23.16 horas, justo cuando Eulàlia (Emma Vilarasau) llega por primera vez al barco, atracado en Vilanova, que minutos después se va a convertir en su tumba. En ese momento, 1.689.000 telespectadores (55,6% de cuota) escucharon a la hermana y ex amante de Mateu (Jordi Dauder) rogar angustiada que éste sobreviviera el tiempo suficiente para poder acabar con la vida de ella. Aun siendo muy elevadas estas cifras de audiencia, son similares a las que registró el primer serial de sobremesa de TV-3, Poble Nou, que se despidió de la parrilla el 26 de septiembre de 1994 con 1.500.000 telespectadores ante el televisor (46,7% de cuota). Otro hito que consiguió Nissaga fue aumentar el número de los telespectadores que ven la televisión los domingos en hora punta. La media es de 2,5 millones y subió a 2,8. Pese a estas cifras tan importantes, el desenlace de la telenovela no satisfizo las expectativas de los adeptos, muchos de los cuales se sintieron defraudados. Ayer, el foro de Internet de Nissaga era un hervidero de comentarios y de reproches hacia los responsables del serial. La mayoría de los telespectadores se confesaban desencantados por el final. Muchas críticas hacían referencia a "la falta de imaginación" de los creadores y había incluso quien se quejaba de que el público no tuviera ni siquiera la oportunidad de ver explotar el barco donde se supone que perdieron la vida Mateu y Eulàlia. Otros lamentaban que un producto "tan especial" como éste tuviera un desenlace "tan soso y patético". Sólo salvaban el testamento de Miquel Capdevila, en el que nombra a su heredero al pequeño Toni Castro. Fue, comentaban, el único golpe de efecto.

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