Anguita pide cautela con Borrell mientras IU aprueba acuerdos y compartir Gobierno con los socialistas

José Borrell no dejó ver el bosque del Consejo Político de Izquierda Unida, celebrado el pasado fin de semana. Pero mientras los delegados discutían sobre las primarias del PSOE se aprobaba, y muy relacionado con esta nueva situación de la izquierda, el informe político elaborado por Julio Anguita. Negro sobre blanco, el documento recoge la estrategia de IU con la propuesta de ir a la unidad con los socialistas hasta compartir Gobierno.

Había sido escrito antes de conocerse los resultados de las primarias. Y es verdad que Anguita prefiere hablar de expectativas, de esperar a ver qué hace Borrell. Pero para algunos delegados esa parte del informe supone abrir una nueva etapa en el diálogo de la izquierda. Había sido Víctor Ríos, coordinador de Presidencia, quien el sábado relacionó nítidamente esta parte del texto con la realidad socialista. "Ojalá", dijo, "el triunfo de Borrell sirva para avanzar en la unidad. Hemos aprobado la necesidad de llegar a acuerdos programáticos y a compartir Gobierno. Ojalá que Borrell levante las hipotecas de González". Rosa Aguilar, portavoz parlamentaria de IU, al valorar el sondeo publicado por EL PAÍS y que da a Borrell una considerable ventaja sobre José María Aznar, mostraba su satisfacción "porque puede echar del Gobierno a la derecha".

El texto que Anguita sometió a votación recoge de forma muy positiva el diálogo con el PSOE -aunque matice algunos aspectos- y aborda la posibilidad cada vez más sólida de llegar a acuerdos en varias fases, tomando como ejemplo el modelo francés. "Para España ese modelo", escribe Anguita, "es válido porque resume y concentra todas las elaboraciones nuestras desde que nacimos". A continuación, el texto habla de varias fases: programa o propuesta común, demanda de confianza al electorado y Gobierno compartido. En esta misma clave, el informe da cuenta de las conversaciones con el PSOE y, sobre todo, de las coincidencias.

Manifiesto comunista

Ayer, Anguita, en el acto del 150º aniversario del Manifiesto Comunista, volvió a hablar de las primarias del PSOE. Y volvió a insistir en la prudencia y la cautela. En la unidad y las diferencias. E insistía en algo que el Consejo de IU, a tenor de las intervenciones, no tenía tan claro: que la interlocución con el PSOE tendría que seguir haciéndose con la actual dirección. Para Anguita, como él mismo expresó el sábado, IU es el barco navegando hacia Ítaca, con Ulises amarrado al timón, sin oír cantos de nadie. Pero la mayoría de los dirigentes creen que el diálogo hay que llevarlo ahora con el triunfador. Francisco Frutos ayer, sin decirlo tan claro, apostó también por Borrell y por la nueva etapa que se abre en la izquierda. Y eso que no dejó de recordar algunas de las leyes de Borrell, como la de alquileres, que "ha provocado miles de desahucios". Frutos, por cierto, tuvo una bellísima intervención cuando -tras el recuerdo emocionado que rindió el responsable de Madrid del PCE, Justiniano Martínez, a los viejos comunistas desaparecidos-, relacionó el manifiesto con El Quijote. Y leyó aquello de "dichosa edad y siglos aquellos a los que los antiguos dieron el nombre de dorados", cuando no había "ni tuyo ni mío".