Romero apuesta por la cohabitación entre Borrell y Almunia en el PSOE
Joan Romero, secretario general del PSPV, mantuvo una neutralidad fingida durante el proceso de primarias desarrollado por los socialistas para seleccionar al futuro candidato a la presidencia del Gobierno, pero las simpatías de sus seguidores por José Borrell eran evidentes. El triunfo de Borrell frente al secretario general del PSOE ha colocado a Romero en una situación de privilegio en el debate interno en torno al futuro de Joaquín Almunia. El dirigente valenciano se ha embarcado decididamente en una operación de ámbito estatal que apuesta por la complementariedad y la cohabitación de ambos dirigentes en el seno del partido.
La federación socialista valenciana fue impulsora del proceso de elecciones primarias y Romero es uno de los pocos responsables regionales que simpatizaba con Borrell y la necesidad de impulsar profundos cambios en la organización. El secretario general del PSPV se ha convertido en un portavoz autorizado de la corriente orgánica más próxima al sentir que expresaron las bases socialistas el pasado viernes y se ha empeñado en una campaña de ámbito estatal que apuesta por la permanencia de Almunia como secretario general del PSOE para aprovechar el caudal de ilusión que han despertado las primarias entre la militancia socialista. Romero cobra así una poderosa distancia sobre la disputa entre los sectores enfrentados en el seno de la federación valenciana, en la que el triunfo de Borrell ha propiciado una inversión de los papeles que han venido jugando hasta la fecha el secretario general frente a Ciprià Ciscar, secretario federal de organización del PSOE.PASA A LA PÁGINA 3
Ciscar considera "extemporáneo" plantear ahora su posible candidatura a las primarias del PSPV
VIENE DE LA PÁGINA 1 Los seguidores de Romero consideran que Ciscar "secuestró" a Almunia durante la campaña interna previa a las primarias para capitalizar el presumible triunfo del secretario general del PSOE en beneficio propio. Y se han apresurado a exigir al secretario federal de organización que de la cara y dispute personalmente a Romero la candidatura a la presidencia de la Generalitat en el inminente proceso de primarias de ámbito regional. El propio Romero se mostró ayer conciliador, invitó a aprovechar el éxito social de las elecciones internas y se limitó a asegurar: "Mi único rival es Eduardo Zaplana". Los movimientos de acercamiento entre los sectores lermista y romerista, -una empresa en la que se han llegado a implicar Antoni Asunción y Joan Lerma personalmente- aíslan todavía más a Ciscar y le convierten en el único rival natural de altura capaz de convertir las primarias valencianas en un proceso creíble. Ciscar, sin embargo, eludió pronunciarse ayer al respecto y señaló que resulta "extemporáneo" plantear en este momento su posible candidatura a las primarias valencianas. El plazo establecido por la organización para la presentación de candidaturas no se abre hasta el próximo 25 de mayo y la votación está prevista que se celebre a finales de junio. El secretario de organización federal lamentó la tendencia a interpretar en clave valenciana un proceso de ámbito estatal que ha constituido un rotundo éxito. Ciscar recordó que de los 34 miembros de la ejecutiva federal, sólo Borrell y Ana Noguera, concejal de Valencia, habían apostado contra Almunia. Los ciscaristas mantienen viva la opción de presentar una candidatura alternativa a Romero, pero advierten que "las prisas, que cada cual las administre como quiera" y señalan que no debe confundirse "la prudencia con la estupidez". La reciente agresividad de los romeristas hacia los seguidores de Ciscar ha causado profundo malestar entre los fieles al secretario federal de organización.Fuentes próximas a Ciscar acusaron ayer a sus rivales de "hacer el juego a la derecha". Las mismas fuentes de tendencia ciscaristas denunciaban una ausencia de debate en el seno de la ejecutiva del PSPV desde su ampliación el pasado mes de noviembre. "Los planteamientos distintos se discuten, pero no se pueden eludir", comentaban, "clónicos y tontos no somos".
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