El secreto de los calambres

Los problemas de calambres que han perseguido a Berasategui en su carrera parecen a punto de concluir. Eso fue lo que explicó ayer el jugador vasco, de 24 años, tras su victoria sobre Albert Costa. Berasategui afirmó que desde enero ya no le preocupa tanto que se alarguen los partidos y que eso le da confianza."En enero", explicó el pupilo de Jaivier Duarte, "realizamos unos análisis de sangre extraída de las arterias y el resultado fue sorprendente. Hasta entonces siempre me habían analizado la sangre de las venas y salía que estaba hecho un toro. Pero en los últimos análisis descubrimos que estaba bajo en defensas, en vitamina C, en cinc, en magnesio y en antioxidantes. Fue un hallazgo que ayudó a resolver mis calambres". Todas estas anomalías impedían -según los médicos explicaron al jugador- que su organismo, transportara adecuadamente el oxígeno a los músculos, y eso le ocasionaba los fatídicos calambres, que le habían obligado a abandonar o a tirar algunos partidos importantes. "Antes, cuando el partido se alargaba, empezaba a pensar más en los calambres que en el juego. Ahora, no. Tanto en Australia -donde gané a Agassi en cinco mangas- como la semana pasada en Estoril comprobé que he mejorado muchísimo. Estoy jugando con una confianza increíble, y creo que si sigo así tendrán que sudar mucho para ganarme", concluyó Berasategui.