El apoyo de Léotard a la creación de un nuevo partido consuma la división de la derecha francesa

, El efecto de los pactos regionales con el Frente Nacional de Jean-Marie Le Pen terminó por convulsionar a la derecha democrática de Francia. El presidente delegado de la Unión para la Democracia Francesa (UDF), François Léotard, se sumó ayer al proyecto de centro y centro-liberal que prepara su compañero François Bayrou. Sin la presencia de Alain Madelin, que ayer rindió cuenta de sus planteamientos para la "modernización" política al presidente Jacques Chirac, los líderes de la UDF acordaron promover el proyecto de partido destinado a refundar o sustituir, su actual formación.

La adhesión de Léotard, quien hace sólo unos días se opuso al proyecto de Bayrou utilizando términos bastante descalificatorios, -"responde a intereses personales", dijo-, aporta al futuro nuevo partido liberal una mayor credibilidad y posibilidades de éxito.Durante los días en los que decenas de dirigentes regionales de la derecha pactaban con el Frente Nacional, el actual presidente de la UDF, partido fundado por el antiguo presidente Valéry Giscard d'Estaing hace 20 años, fue el único de los grandes dirigentes de su partido en pronunciarse abiertamente contra esas alianzas con la extrema derecha de Le Pen.

Frangois Bayrou hizo lo propio después de haber permanecido silencioso en el inicio de la crisis. Alain Madelin, el otro de los grandes dirigentes de la UDF, felicitó por el contrario a los cinco presidentes regionales reelegidos con los votos del partido de Jean-Marie Le Pen. Aunque, posteriormente, ha reclamado la dimisión de esos mismos presidentes, Madelin es partidario de mantener relaciones con el Frente Nacional con el objetivo de evitar su ascenso electoral y pone el énfasis en el aspecto liberal de su proyecto político.

La propuesta de partido de Francois Bayrou, que no pocos dirigentes de la UDF juzgaban precipitada hace tan sólo 48 horas, puede ínterpretarse como el intento de tomar posiciones ante el desmembramiento de esa formación y responde, sobre todo, al propósito de adelantarse al proyecto de Madelin. Ayer, Bayrou declaró sin rodeos: "Creo que a partir de ahora podemos decir que tendremos antes del verano un verdadero partido nuevo".

Un grupo de diputados y senadores, en número creciente en los últimos días, han mostrado ya su adhesión a la propuesta de Bayrou pero queda aún por conocer el apoyo real con que cuentan en la base del partido. El fundador de la UDF, Valéry Giscard d'Estaing, no parece entusiasmado con estos movimientos y al igual que el resto de los dirigentes pide que los militantes sean consultados.

Coalición de barones

Las dificultades son numerosas. Una de estas dificultades es la estructura del partido. La UDF está en la práctica organizada como una coalición de barones con sus correspondientes partidos. De hecho, Bayrou preside Fuerza Democrática y Alain Madelin Democracia Liberal. Más allá de las cifras de simpatizantes que se atribuyen, 100.000 en ambos casos, la implantación real de estos partidos es más bien dudosa. Léotard, por su parte, parece haber renunciado a su teoría de que la unificación del conjunto de la derecha democrática dejaría un amplio espacio de desarrollo al Frente Nacional, que basa su discurso en el ataque a la inmigración, sobre todo la, procedente del Magreb y de África.En una tribuna que el diario conservador Le Figaro publicó ayer, el presidente delegado de la UDF propone al RPR (Unión por la República, gaullistas) una "reflexión conjunta" para sacar las conclusiones de la crisis "antes de que cada familia consulta a sus bases". Mientras, el presidente Chirac prosigue con su ronda con consultas entre los partidos democráticos, es decir, todos menos el Frente Nacional. El objetivo del presidente francés es sondear a los dirigentes políticos sobre la posibilidad de reformar el sistema político e impedir el ascenso de la extrema derecha, a la que calificó la pasada semana de "xenófoba".

Madelin dijo a los periodistas, tras su encuentro con Chirac, que es necesario, además de estudiar la reforma de la UDF, ahondar con los cambios en el sistema político.