El acto fallido de Mario Conde con Emilio Serratosa
Cuando declaró sobre la operación cementeras, Mario Conde habló el martes de la relación entre Banesto y la familia Serratosa. Conde dijo: "Y el señor Serratosa..., don Emilio, que en paz descanse". Conde se refería a José Serratosa Ridaura, que fue presidente de Valenciana de Cementos y consejero de Banesto, su hermano. Emilio Serratosa declaró en tres ocasiones en el caso Banesto.Al menos 332,2 millones de beneficio de la operación, que se quedó la sociedad Gay Cordon, controlada por Conde, procedieron de Cementos del Mar, de la familia Serratosa, que vendió por 53 millones dos sociedades (Ariforsa y Prebetong Este) y las recompró en el acto por 386 millones. Serratosa nunca aclaró esos 332,2 millones. Quizá porque hay otros antecedentes, Romaní pidió a Serratosa una comisión "para Banesto". Es una hipótesis.
Gay Cordon también compró por 176 millones otros dos paquetes de hormigoneras: Hormifasa y Prebetong Aragón. Los transfirió por el mismo precio, 176 millones, a Data Transmission Systems, que los vendió a Portland Iberia (Banesto) por 1.403 millones, con una ganancia de 1.226 millones.
Conde insiste en su versión inicial, agarrándose a los citados 332,2 millones. Los 1.500 millones, dice, fueron "habilitados" por Serratosa, que vendió las cuatro hormigoneras por un precio irrisorio cuando valían los 1.500 millones que pagó Banesto. Quizá Conde cometió un acto fallido al decir que Emilio Serratosa había fallecido. "Don Emilio", como le llamó, será testigo en el juicio.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.