Misión cumplida para otros españoles

Misión cumplida: los atletas españoles alcanzaron los niveles previstos. Los candidatos a medalla, fundamentalmente los mediofondistas, se clasificaron para la final, aunque sus actuaciones resultaron muy diversas. Andrés Díaz y José Antonio Redolat dominaron con autoridad las semifinales de 1.500 metros, y lo mismo hizo Alberto García con una astuta carrera en 3.000 metros. Sin embargo, Isaac Viciosa y Manuel Pancorbo se vieron envueltos en una prueba tan táctica que dio opciones a todos los participantes. Eso significa codos, desgaste y la angustia que producen las pruebas que se deciden en los últimos metros. Los dos pasaron a la final, pero con un punto de sufrimiento. Mar Sánchez, una gimnasta de Ibiza reconvertida súbitamente en saltadora, se convirtió en la primera atleta española que supera los cuatro metros en salto con pértiga, una especialidad todavía balbuceante entre las mujeres. En categoría masculina, Montxu Miranda confirmó su excelente estado y alcanzó un puesto en la final con un salto de 5,65 metros. García Chico, con 5,55, también pasó a la final. Inma Clopes, con 4.234 puntos, batió el récord de España de heptatlón, la única final, ganada por la polaca Wlodarczyk.