Anand vence en la 'muerte súbita'
Más tensión, imposible. Con nervios de acero, virtuosismo y reflejos supersónicos, Viswanathan Anand y Michael Adams maravillaron a un público paralizado por la emoción. El indio pasó un suplicio de cuatro horas para romper al galope la numantina resistencia del británico en la muerte subita (5 minutos para las negras, 4 para las blancas) tras empatar ayer cuatro partidas rápidas y, antes, otras cuatro a ritmo normal. Adams cobró 50 millones de pesetas; Anand retará a Anatoli Kárpov desde el viernes con una bolsa de 300 millones; de ellos, 200, para el ganador.
"Soy demasiado viejo para esto", dijo Anand, de 28 años, mientras buscaba el abrazo de su esposa tras salir entero y victorioso del potro de tortura. Unos segundos antes de estrechar la mano de su rival en señal de rendición, Adams, de 26 años, fue capaz de sonreir mirando al techo. ¿Qué pensó en ese momento? "Me di cuenta de que iba a perder ante un gran rival y soñé con tener más suerte en el próximo Mundial", explicó después.En su situación, tras empatar dos partidas de 25 minutos por bando y otras dos de 15 antes de la muerte súbita, casi todos los ajedrecistas profesionales sufren temblores en sus manos y un cansancio inenarrable; ellos parecían frescos como lechugas. La partida decisiva fue de una calidad asombrosa si se tiene en cuenta su vertiginoso ritmo, que en algunos momentos fue de dos movimientos por segundo.
Aparte de alguna tos aislada entre los 300 espectadores que llenaban la sala, sólo se oían los golpes al reloj en un ambiente de tensión extrema, que afectó incluso a los habitualmente gélidos periodistas indios: "Me voy de aquí. No puedo soportarlo más", susurró uno de ellos.
La metáfora del boxeo mental fue más clara que nunca. Y hubiera sido aún mayor si el georgiano Elizbar Ubilava, entrenador de Anand, hubiera dispuesto de una toalla para dar aire a su pupilo cuando éste se reunía con él en un rincón durante los intervalos. Adams, que carece de entrenador, se sentaba en el rincón opuesto sin ofrecer un solo síntoma de nerviosismo.
Preguntado por la razón de su triunfo, el ajedrecista asiático elogio a su rival: "No sé si soy un jugador más fuerte, tengo mejores nervios o más suerte que Mickey. Si sé que estuve a punto de perder la segunda partida de hoy. En ese caso, le harían la mísma pregunta a él. Hemos demostrado, que somos los dos mejores del centenar de participantes".
Anand ironizó sobre sus posibilidades ante Kárpov, al mejor de 6 partidas en el Museo Olímpico de Lausana: "Cuando empezó este torneo, un amigo me comentó que Kárpov estaría esperando tranquilamente a ver quién llegaba a Lausána metido en un ataúd. Dado que voy a viajar allí fuera de la caja, no es imposible que gane".
Desarrollo
Blancas: Anand. Negras: Adams.
1 e4 c6,2 d4 d5 3 ed5 cd5 4 c4 Cf6 5 Cc3
e6 6 Cf3 Ae7 7 cd5 Cd5 8 Ac4 Cc3 9 bc3
0-0 10 0-0 Cd7 11 Ad3 Dc7 12 De2 Te8
13 c4 g6 14 c5 Cf6 15 Ce5 Ad7 16 Af4
De8 17 Tabli Cd5 18 Ag3 Tf8 19 Tfcl Af6
20 Cc4 Ad4 21 Cd6 Dd8 22 Cb7 Df6 23
c6 Ac8 24 Th3 e5 25 Ae4 Ae6 26 Tf3 Dg5
27 Del De7 28 Da5 Ab6 29 Da3 Da3 30
Ta3 f6 31 Cc5 Ac5 32 Tc5 Cc7 33 f3 a634h4 Tad8 35 Tc1 Td2 36 Ael Ta2 37
Ta2 Aa2 38 Aa5 Tf7 39 Tdl Cb5 40 Tc1C. c7 41 Tdl Cb5 42 Td8 Rg7 43 Ta8 Ac4 44 Th8 f5 45 Ac2 Ad5 46 Tb6 Cd6 47 c7 Cc8 48 Th8 Tf8 49 Aa4 Ae6 50 Ac3 Rf6 51 f4 Rf7 52 Ae5 Ce7 53 Td8-Ct8 54 Rf2 Re7 55 Ac6 a5 56 Ab7 Rf7 57 Ac6 Re7 58 Ac3 Rf7 59 Aa5 Tg8 60 Ab4 Ca7 61 Aa,4, Cc8 62 Ac5 h6 63 Ab5 g5 64 fg5 hg5 65 h5, y Adams se rindió.
Más información y partida comentada en
EL PAÍS DIGITAL. http://www.elpais.es
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