Los partidos apoyan la idea de que Felipe González presida la Comisión Europea

El hecho de que el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, apoye la idea de dirigentes europeos de que Felipe González aspire a la presidencia de la Comisión Europea ha sido vista muy favorablemente en todo el panorama nacional. Desde el secretario general de la OTAN, Javier Solana, hasta el presidente de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga, consideran razonable esta nueva adhesión. El presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, sin embargo, puso una nota, distinta al señalar que el ex presidente del Gobierno volverá a la política nacional a medio plazo "y no optará a la presidencia de la Comisión Europea porque no le seduce el clima de Bruselas".

Desde que González dejara voluntariamente el primer plano de la política al no presentarse a la reelección como secretario general del PSOE, ayer fue la primera vez que un dirigente de su partido augura que volverá a la política nacional, aunque sin determinar a qué puesto. "Los españoles volverán a situar a Felipe González en responsabilidades nacionales y no en tareas europeas", dijo Bono. El político castellano-manchego, miembro de la comisión ejecutiva federal del PSOE, señaló que el exlíder de su partido "tiene bastantes cualidades para ser el primero y ha dicho hasta luego y no hasta nunca". Sería una pena y un derroche, según Bono, que una persona "con su capacidad y experiencia" abandone la política.No es que Bono considere a González inadecuado para presidir la Comisión Europea, sino que se trata de su convicción de que Felipe González no quiere. De esta última opinión participa el secretario general del PSOE, Joaquín Almunia, a quien le agradó saber que Jordi Pujol coincida con líderes internacionales en pensar que "Felipe González es uno de los mejores políticos europeos y una de las pocas personas que tiene en la cabeza lo que debe ser un, proyecto de futuro para Europa y, además, capacidad para impulsarlo". Después de los elogios, Almunia recordó que González "ni siquiera piensa en asumir esa responsabilidad".

Desde la misma órbita ideológica que González y Almunia habló el secretario general de la OTAN, Javier Solana, que llegó ayer a Madrid para pasar las fiestas navideñas. Solana señaló que "Felipe González sería un espléndido presidente de la Comisión Europea por su capacidad y por ser un europeísta convencido con cualidades para hacer frente a los enormes retos que tiene la Unión Europea en los próximos años". Solana recordó, no obstante, que el mandato del actual presidente, Jacques Santer, no concluye hasta comienzos del 2000, por lo que es muy pronto para hablar de este asunto.

Desde otros partidos también llegaron opiniones. El portavoz del PNV, Iñaki Anasagasti, consideró que le parecería muy bien esa candidatura porque su partido no desea mal a nadie y si ese hecho "es bueno para él y para Europa", a los peneuvistas les satisface.

Manuel Fraga, por su parte, apeló a la experiencia de González para considerar buena la posibilidad de que ocupe ese puesto. El coordinador del Grupo Parlamentario Popular, Rafael Hernando, destacó también la preparación de Felipe González para ocupar tal cargo.