Gesto por la Paz critica a los partidos por dejarse llevar por el electoralismo
A Gesto por la Paz le preocupan las continuas disputas entre partidos a cuenta de la política antiterrorista. "Como ciudadanos, nos da muchas veces pena que [los partidos] utilicen la violencia como arma arrojadiza entre ellos, como arma política para conseguir más votos. Es muy lamentable. Además, es algo muy generalizado y es muy difícil afirmar qué partido se libra de ello" afirmó ayer Ignacio Urrutia, miembro de la comisión permanente de la coordinadora pacifista. La novena asamblea general de Gesto por la Paz, celebrada en Bilbao, debatió sobre cómo conseguir que los partidos abandonen la utilización electoralista de la violencia.La de ayer fue la primera asamblea ordinaria tras dos años marcados por los secuestros del funcionario de prisionles José Antonio Ortega Lara y del abogado Cosme Delclaux. Gesto por la Paz, como la víspera había hecho el movimiento social Elkarri, pidió a ETA que dé una oportunidad "a la política no violenta".
Ahora que ETA no tiene a nadie secuestrado, uno de los aspectos en los que Gesto por la Paz quiere centrar su actividad el año que viene es en "denunciar las violaciones de derechos humanos en centros de detención, o las condiciones carcelarias, que a veces son humanitariamente muy deficientes", según Urrutia.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.