VIDA O MUERTE POR TELÉFONO

Cuarenta y uno de cada 100.000 rusos se suicidan cada año e Isaac Gurovich, vicedirector del Instituto de Psiquiatría del Ministerio de Sanidad, cree que la cifra aumentará si se aplica en Moscú una reforma de las tarifas telefónicas que limitará a 22 minutos diarios el tiempo que se puede hablar sin que aumente la factura mensual. En una carta abierta al alcalde de la capital, Yuri Luzhkov, este y otros psiquiatras advierten de que los teléfonos de la esperanza perderán buena parte de su eficacia si quienes llaman tienen que pagar 100 rublos (2,5 pesetas) por cada minuto que se pasen del límite. "Convencer a una persona de que no se haga daño a sí misma no es cuestión de minutos", señalan. Lo que no explican bien los psiquiatras es por qué un presunto suicida se preocupa por una factura que, de cumplir con su propósito, no pagaría.-