Un temporal de viento, lluvia y nieve sacude Madrid

La lluvia, el viento y la nieve atacaron ayer la región por todos sus flancos. El aeropuerto de Barajas tuvo que cerrar una de sus dos pistas durante dos horas (de 11.00 a 13.00) a causa del fuerte viento racheado que azotó las instalaciones. Las carreteras de la sierra se cubrieron de nieve y cinco puertos requirieron el uso de cadenas. El viento alcanzó en el sur de la región hasta 107 kilómetros por hora, y la Dirección General de Protección Ciudadana activó el Plan de Inclemencias Invernales. Es decir, puso a todos sus efectivos en situación de alerta por si el temporal se agravaba. Los ciudadanos, escarmentados por los colapsos circulatorios del pasado miércoles, se decidieron por el transporte público. El tráfico en la capital disminuyó un 11%, mientras que los usuarios de los trenes de Cercanías aumentaron un 12%, y los del metro un 4%. Los bomberos del Ayuntamiento y la Comunidad realizaron más de 230 salidas de urgencia.

BARAJASRetrasos en la mitad de los vuelos

El aeropuerto de Barajas no fue ajeno a las inclemencias del tiempo. Entre las once y la una de la tarde, el fuerte viento racheado, de hasta 60 kilómetros por hora, obligó a cerrar una de sus pistas. Los aviones no podían tomar tierra porque el viento les daba lateralmente, y corrían el riesgo de salirse de la pista. Todos los despegues y aterrizajes tuvieron que efectuarse por la única pista que quedó abierta. Los retrasos fueron entonces generalizados. Un portavoz de aeropuerto los cifró, al mediodía de ayer, en "unos treinta minutos de media", aun que las demoras superaron en ocasiones las dos horas. Por la tarde, los retrasos subieron hasta los 40 o 45 minutos. Barajas argumentó que el problema estribaba en los permisos europeos de vuelo que concede Bruselas.

TRÁFICO

La circulación disminuye un 11%

Las calles de Madrid amanecieron ayer con menos atascos. La intensidad circulatoria descendió un 11%, según el Ayuntamiento. La hora punta matinal acabó a las nueve y media. "Los conductores han optado por madrugar más o por el transporte público, tras el caos del miércoles", señaló un portavoz de la Policía Municipal. En los accesos de entrada a Madrid la intensidad fue también menor. Los trenes de cerca nía, en cambio, aumentaron la cifra de viajeros un 12%, y el metro, un 4%.

La nieve fue la protagonista de las carreteras de la sierra. La N-VI, a partir del kilómetro 51, requirió la actuación de las máquinas quitanieves, que también limpiaron a primera hora los accesos al puerto de Navacerrada. La Dirección General de Protección Ciudadana ordenó el desplazamiento a todos los puertos afectados por la nevada (Morcuera, Canencia, Navafría, Leones, Cotos, Navacerrada, Paradilla, Hiruela, Puebla, Cardoso y Cruz Verde) de máquinas quitanieves y camiones-cuña.

El Ministerio de Fomento, por su parte, decidió ayer retrasar la apertura de los nuevos accesos a la N-V desde el Alcorcón. Fomento tomó esta decisión por que la meteorología podría "complicar aún más la circulación y provocar mayores atascos" en esta carretera nacional. Los nuevos accesos forman parte de las obras que Fomento está realizando para evitar el embudo forma do entre la N-V y la M-40. .

INUNDACIONES

Desalojo de un centenar de familias

La colonia Guadarrama fue la zona de Móstoles que sufrió con más virulencia los estragos del temporal La crecida del Arroyo del Soto, muy cercano a las casas bajas de esta urbanización, provocó que alrededor de 100 familias se quedaran incomunicadas, según el portavoz vecinal, Manuel Guzmán. La carretera que comunica esta colonia alejada algo más de un kilómetro del casco urbano con el barrio de El Soto, sufrió varios cortes. Los que se salvaron de las consecuencias del aguacero fueron, paradójicamente, las viviendas ilegales del poblado de Las Sabinas, en pleno margen del río Guadarrama. Pese a que el caudal creció considerablemente, el agua no las rebosó "aunque el peligro sigue latente ante la posibilidad de que se abran las compuertas de la presa", dijeron los vecinos. El Parque de Andalucía, en Móstoles, se despertó con un embalse de 80 metros de diámetro y 80 centímetros de profundidad. Las fuertes lluvias anegaron también la entrada al cementerio nuevo de Alcorcón. En lo tocante al viento, los bomberos pasaron el día retirando vallas y contenedores atravesados en medio de la calzada así como árboles caídos.

En Madrid, varias casas bajas de los barrios de Vereda de Ganapanes, en Mirasierra, y del Puerto de Canfranc, en el distrito de Vallecas, tuvieron que ser desalojadas la pasada madrugada por inundaciones y peligro de derrumbamiento.

DESPRENDIMIENTOS

Dos heridos graves al caerles un árbol

En la capital, las inclemencias meteorológicas se cebaron en los puntos más débiles. Los bomberos realizaron 45 salidas durante la mañana para retirar de la vía pública árboles, carteles, farolas y sanear cornisas. En la calle de Castelflorite (Carabanchel) la rama de un árbol causó heridas graves a dos viandantes. Ruth M. G., de 21 años fue evacuada por el Samur al hospital Clínico con una contusión lumbar y Verónica R. M., de 18 años, ingresó en el Gregorio Marañón con traumatismo craneoencefálico.

En la céntrica plaza de España se desplomó a causa del viento que azotó la ciudad por la noche un andamio de 20 metros- de altura, situado en el edificio Torre España, donde se ubica el hotel Holiday Inm. Además, los bomberos evacuaron a primera hora de ayer a 50 escolares de corta edad de un colegio de la calle de Villastar, en el distrito de Villaverde. Se desplomó un muro de la cuarta planta sobre tres coches aparcados..

En Rivas-Vaciamadrid fue desalojado un instituto de enseñanza media por derrumbe del techo de uralita.

En Getafe, la explosión de un transformador de la luz dejó sin suministro eléctrico, durante cinco horas, a los barrios de Las Mararitas y el Casar. En Paracuellos, un árbol se derrumbó sobre el ambulatorio. Taponó la puerta. Las personas que estaban en su interior tuvieron que esperar la llegada de los bomberos.

En Alcobendas, el viento derrribó nueve árboles, que causaron desperfectos en varios vehículos. El viento tumbó un árbol de 15 metros de altura sobre un edificio de la calle de Canarias de Fuenlabrada.

PROTESTAS

Sin acceso a los colegios de Parla

Las fuertes lluvias caídas durante la madrugada de ayer causaron graves trastornos a los escolares de Parla que se disponían a acudir a sus centros. La mayoría de los colegios, situados fuera del casco, tuvieron accesos casi intransitables. Unas 100 madres de alumnos de los colegios Gerardo Diego y La Paloma se manifestaron durante la mañana de ayer frente al Ayuntamiento para protestar por la falta de accesos.