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Vázquez y Caballero ofrecen sus cargos al PSOE gallego y animan a sus críticos a presentarse

Xosé Hermida

El secretario general del PSOE gallego, Francisco Vázquez, lanzó anoche un órdago a los dirigentes de su partido que se han alzado contra él para culparle del descalabro de la coalición de izquierdas en las elecciones autonómicas de] pasado domingo. Vázquez no va a dimitir, pero ha puesto su cargo a disposición del comité nacional del partido, máximo órgano entre congresos, convocado para el próximo sábado. Y animó a sus críticos a que presenten alternativas porque, asegura, su propósito no es "aferrarse al cargo". Abel Caballero, el candidato de la coalición, se sumó a la declaración de Vázquez

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El fuego contra Vázquez lo abrió el pasado lunes el alcalde de Santiago de Compostela, Xerardo Estévez, a quien se sumaron poco después los regidores de Vilagarcía de Arousa (Pontevedra), Joaquín Gago, y el de 0 Carballiño (Ourense), Manuel Vázquez, miembro de la ejecutiva gallega, además de Enrique Curiel. Todos coincidieron en culparle de la derrota electoral y en insinuar, de modo más o menos velado, que debería dimitir.Vázquez reunió ayer a la ejecutiva gallega, que estuvo debatiendo durante más de seis horas la delicada situación en que ha quedado el PSdeG, desplazado por el Bloque Nacionalista Galego como principal fuerza de oposición a Manuel Fraga. Casi todos los miembros de la dirección son fieles a Vázquez y alguno, como el vicesecretario general, Miguel Cortizo, había adelantado de antemano su opinión de que no era necesario "cortar cabezas" para evitar que el partido se enzarce en una bronca interna como la que sucedió a la anterior derrota electoral de 1993. En esa ocasión, la revuelta la dirigió el propio Vázquez y acabó con la carrera política del entonces secretario general, Antolín Sánchez Presedo.

La respuesta del alcalde de A Coruña ha sido plantearle un pulso a los críticos. Él pone su cargo a disposición del partido para que el comité nacional debata "serenamente" el "gravísimo momento" que atraviesa la organización tras el desastre electoral. E invita a los descontentos a que se lancen abiertamente a la arena y planteen alternativas. "Yo asumo toda la responsabilidad por la derrota", declaró Vázquez al término de la reunión de ayer, cerca de la medianoche, "quiero dar ejemplo y contribuir a que suceda lo contrario de lo que pasó hace cuatro años. No pretendo batallar para conservar el puesto ni me aferro a ningún cargo".

Vázquez, tras casi siete horas de tensa reunión, se limitó a leer una declaración y advirtió que no contestaría a las preguntas de los periodistas, a quienes informó de que Abel Caballero, que también es presidente del PSdeG, se había sumado a su propia iniciativa. Entre líneas deslizó una crítica al alcalde de Santiago, cuando afirmó que los socialistas deben "hablar dentro del partido".

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Sobre la firma

Xosé Hermida
Es corresponsal parlamentario de EL PAÍS. Anteriormente ejerció como redactor jefe de España y delegado en Brasil y Galicia. Ha pasado también por las secciones de Deportes, Reportajes y El País Semanal. Sus primeros trabajos fueron en el diario El Correo Gallego y en la emisora Radio Galega.

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