Wall Street sufre nuevas perdidas y el índice roza los 7.850 puntos

Las empresas tienen problemas para mantener sus resultados al alza y las cotizaciones han dejado de subir. Alan Greenspan, presidente de la Reserva Federal, lo advirtió hace unos días y ha acertado, puesto que la Bolsa de Nueva York ha entrado en una fase negativa. Al cierre de la sesión de ayer perdía 91,85 puntos, (1,16%) y el índice Dow Jones quedaba en 7.847,03. El retroceso, sumado a los 119 puntos que perdió el jueves, justifica sobradamente la preocupación de los inversores.

La Bolsa de Madrid perdió un 1,38% y acumula ya un descenso del 8,35% este mes. El índice general quedó en 586,70 puntos. También el mercado de deuda mostraba un comportamiento negativo y la rentabilidad del bono a 10 años subió hasta el 6,04%, con un avance de 30 centésimas en los últimos 10 días.

La situación de la economía norteamericana no es mala, pero es muy confusa y así lo reflejan los numerosos indicadores que cada semana salen a la luz. Mientras que los analistas estaban centrados en la creación de empleo y en los consecuentes datos del consumo, los resultados empresariales les han dado la clave.

En el último trimestre las cosas van definitivamente peor. Han sido sólo unas cuantas empresas, pero en los primeros días de la se mana que viene casi todas las grandes sociedades norteamericanas darán a conocer sus resultados y los inversores están preocupados, como demostraba la andana da vendedora que le lanzaron a la Bolsa en las primeras horas de la jornada de cierre de semana.

En España, la situación de las dos empresas emblemáticas de la economía, Telefónica y Endesa, tampoco es la mejor de las posibles por el cuestionamiento de sus alianzas y, otra vez, la incertidumbre sobre los resultados económicos. La coyuntura, hoy, parece menos firme de lo prometido.