Garaikoetxea reprocha al Rey "hostilidad" hacia él y hacia EA

Carlos Garaikoetxea, presidente de Eusko Alkartasuna (EA) y ex lehendakari, reprochó ayer al Rey el haber realizado, en una reciente recepción a una entidad cultural vasca, "juicios y valoraciones políticas, por cierto muy despiadadas", que mostraban "su rotunda hostilidad hacia EA" y hacia su líder, según versión del propio Garaikoetxea. Éste mencionó el asunto como una de las explicaciones de que haya declinado acudir mañana a la inauguración del Museo Guggenheim, en Bilbao.

Garaikoetxea declaró en la COPE: "No soy muy aficionado a saraos y festejos, y cuando un festejo como la inauguración del Museo Guggenheim tiene determinadas connotaciones políticas y sociales más que culturales casi, uno tiene derecho a rehusar si además lo hace correctamente, que es lo que he hecho... Lo que pasa es que trascendió por alguien que tenía interés en que trascendiera y me he visto obligado a explicar que rehusaba por esas connotaciones. Si me aprieta un poco más, añadiría que uno tiene derecho a ser más o menos monárquico".El presidente de EA adujo después "una anécdota, que no es la más importante", para explicar su actitud: "En una de las últimas recepciones que el Rey dio a una de las entidades culturales de mayor prestigio en el País Vasco, el Rey manifestó su rotunda hostilidad hacia EA y hacia mí, haciendo votos por su fracaso electoral, etcétera. Esto me lo contaron las personas que estaban allí. Porque incluso el error consistió en decir esas cosas en semejantes sitios. Y me parece mucho más lógico que un político pueda valorar políticamente la monarquía que el que un rey se permita hablar públicamente de esa manera; es decir, haciendo juicios y valoraciones políticas, por cierto muy despiadadas, de un partido político y de una persona que siempre ha sido muy correcta con él. En esto no hay una actitud de reacción personal o de partido".

"Las instituciones del Estado, el propio cuadro constitucional", continuó Garaikoetxea, "lo asumimos en tanto en cuanto reconozca el carácter plurinacional del Estado. Eso no se da y, por eso, nuestra postura cara a la Constitución: aunque acatamos y funcionamos respetuosamente dentro de su marco, tuvimos nuestras reservas. Además hay otras historias, que son muy serias y reiteradas, algunas vinculadas con la caída de mi segundo Gobierno, etcétera. Mi actitud fue de absoluto respeto y corrección a la hora de reaccionar, no hablé ni una sola palabra y pensé que las cosas discurrirían así ante una fiesta de una manera determinada".