La edad de oro
España nunca ha estado a la altura de su prestigio futbolístico en los Mundiales. Quizá porque es un país más entregado a sus clubes o quizá porque a la selección siempre la ha faltado un hilo argumental, el caso es que la Copa del Mundo ha sido muy esquiva con nuestro fútbol. Por primera vez, todos los signos son positivos. Probablemente España nunca ha contado con un equipo tan atractivo y con tantas condiciones. Ni tan siquiera se puede recurrir a la tesis fatalista para aliviarse de responsabilidades. En Barcelona 92, la mitad de la actual selección ganó la medalla de oro. Raúl y Santi fueron subcampeones de Europa con la sub 21. Y el resto es gente experta que ha pasado por Mundiales, Eurocopas y las mejores competiciones internacionales. Carácter y carisma tampoco faltan. La mayoría de los internacionales forman el espinazo de sus equipos. Y sobre la calidad no hay dudas. Es una selección que puede resolver los partidos de diez formas diferentes, porque más que nunca hay clase, potencia y gol.
