El Milan toca fondo y se hunde a 10 puntos del Inter

El Milan de los 14 extranjeros, el superequipo que Berlusconi le prometió a Capello para que abandonase el Real Madrid, no funciona. Una nueva derrota, en casa ante el Vicenza (0- l), le hunde en la clasificación, a 10 puntos de su vecino, el Inter de Milán, que vive una situación felicísima: cuenta todos sus partidos por victorias y empieza a degustar de los goles de Ronaldo (le marcó dos goles al Lecce el sábado dentro de una espléndida goleada, 1 -5). Es el peor comienzo del Milan en 59 años. Tanto es así que todos fueron a buscar al dueño del club para conocer cuál era su reacción: "¿Que quieren, que muestre mis lágrimas en televisión?, dijo Berlusconi con un visible enfado mientras trataba de zafarse de la presencia de los periodistas. Horas más tarde, dio una primera conclusión: "Hemos buscado campeones que jueguen con el corazón y no sólo con sus habilidades: les daremos preferencia a los italianos hasta donde sea posible". Berlusconi se unía así a quienes criticaban la dificultad de hacer un equipo con 14 jugadores no nacidos en Italia.

El Milan fue incapaz de derrotar al Vicenza y, mucho menos, de sobreponerse a una adversidad, justo una de las cualidades que parecían sobresalir en los equipos de Capello: Di Napoli consiguió el único tanto del partido al final de la primera parte. El Milan dominó al Vicenza durante la primera parte, dispuso del balón y de las mejores oportunidades. Pero el gol fue para el Vicenza y ahí comenzaron los males del equipo, un puro desconcierto en la reanudación. La situación para Capello no es del todo preocupante: la crítica le respeta y guarda silencio y Berlusconi acostumbra a dejar bien claro que el técnico tiene plenos poderes en el club. Sin embargo, no puede permitirse una crisis indefinida: no hay técnico indemne a los resultados.

El Inter de Milán domina la Liga con datos satisfactorios: ha ganado sus cuatro partidos y ha marcado 14 goles, un promedio verdaderamente inusual en el calcio.