El PSOE denuncia presiones del presidente de Telefónica y de un asesor personal de Aznar

El PSOE decidió ayer denunciar ante la opinión pública que está recibiendo "amenazas y avisos de la Compañía Telefónica" en respuesta a la dura crítica que los socialistas están haciendo de esta empresa por su relación con los medios de comunicación. Dirigentes del primer partido de la posición aseguraron a este periódico que as presiones han venido directamente del residente de Telefónica, Juan Villalonga, la primera de ellas fue formulada antes del verano. La última se produjo el lunes pasado, en voz de Pedro Arriola, asesor del presidente de Telefónica y asesor personal del presidente del Gobierno, José María Aznar, en materia electoral. Los socialistas señalan que el receptor de las advertencias ha sido siempre el mismo: "Un alto dirigente socialista". De momento pretenden mantenerle en el anonimato.

Los socialistas decidieron ayer denunciar estas supuestas amenazas al estar persuadidos de que más pronto que tarde aparecerán algunas acusaciones de personas que tuvieron alguna ligazón con Telefónica en tiempos de Luis Solana, nombrado por el PSOE presidente de la compañía, y que al parecer pudieron cometer algunas irregularidades. La decisión que ha tomado la ejecutiva del PSOE es emplazar a quien les amenaza a que siga adelante y, si tiene algo que denunciar, vaya a los tribunales. En la dirección del PSOE se piensa, "a modo de elucubración", que los supuestos trapos sucios que la Telefónica actual quiere endosar a los socialistas podrían tener que ver con Pedro Sancho, que fue presidente de una pequeña filial de Telefónica.Este militante socialista, que falleció ahogado en el Caribe durante unas vacaciones, aparece ligado a los nombres de Sotero Jiménez y Carlos Mangana, ambos presuntamente relacionados con el pago de comisiones ilegales. El PSOE siempre ha dicho que si cobraron comisiones, sería para ellos, no para el partido.

Los socialistas llegaron al nombre de Pedro Sancho buscando durante el verano qué podría haber de irregular en Telefónica durante el mandato del PSOE. Lo hicieron después de que su actual presidente, Juan Villalonga, se dirigiera a un "alto responsable socialista" para advertirle que su partido debía "pensar bien si iba a continuar con sus ataques a la compañía, porque estaban en condiciones de desempolvar asuntos de] pasado que no favorecían al partido que dirigía Felipe González". Éste es el relato que hizo ayer a este periódico un miembro de la dirección del PSOE, poniendo en su boca lo que, al parecer, casi literalmente transmitió Villalonga a su compañero.

Ese mismo alto responsable socialista recibió anteayer una llamada de Pedro Arriola, asesor de Juan Villalonga y de José María Aznar. "Estáis en una actitud que nos va a obligar a decir algunas cosas vuestras del pasado". La respuesta fue la de preguntar al asesor de Telefónica si le estaba amenazando. Arriola le dijo que no se lo tomara así.

Lo cierto es que la dirección del PSOE sí lo ha tomado como una amenaza. Al mediodía de ayer, el nuevo portavoz del grupo parlamentario socialista, Juan Manuel Eguiagaray, sorprendió en el Congreso al afirmar que su partido está recibiendo "amenazas" y "avisos" de Telefónica. No quiso contar detalles de lo que estaba pasando. Pero a través de los medios de comunicación respondió a Telefónica que el PSOE "no tiene ningún temor" y va a seguir denunciando a esta compañía en tanto que siga utilizando su capital en la compra de medios de comunicación para ponerlos al servicio del Gobierno y del PP. "No tenemos ningún temor a que puedan utilizar informaciones que puedan obrar en manos de su compañía", enfatizó. En la dirección de su partido fueron más explícitos y contaron a este periódico su sospecha de que las informaciones supuestamente peligrosas para el PSOE tendrían que ver con el fallecido Pedro Sancho.

La última llamada que el PSOE considera una amenaza, y que tiene como protagonista a Arriola, se produjo después de que Eguiagaray denunciara a primera hora de la tarde del lunes la actividad de Telefónica. Eguiagaray fue muy duro con Juan Villalonga al considerar que está utilizando "un patrimonio generado durante muchos años por todos los españoles" a favor del Gobierno y del PP. Este portavoz pidió a los accionistas de Telefónica que "no hagan el juego a quienes reciben órdenes de La Moncloa". Portavoces de Telefónica se negaron ayer a responder a las acusaciones del PSOE. "Sin comentarios", dijeron en la compañía que preside Villalonga.