LA FURIA DE UN FOGOSO

Un obrero de la ciudad italiana de Padua, de 40 años, ha pedido la intervención de la policía ante la negativa de su mujer a tener relaciones sexuales con él. Los agentes, avisados por el teléfono de urgencia alegando "un hecho muy grave", llegaron a la casa del trabajador véneto, al que encontraron presa de la furia quejándose de que su santa eludía el cumplimiento del llamado débito conyugal y conminándoles a convencerla para que se pusiera a ello. El caso ha empezado a interesar al mundo del cine, y el actor y director Carlo Verdone ha comentado que todo parece propio de una película y que se- ve, una vez más, que la realidad supera la fantasía. Un oficial de la policía ha explicado que en verano suelen recibir muchas llamadas para apaciguar peleas matrimoniales, pero que es la primera vez que alguien les pide que entren en tan íntimos recovecos, por lo que todo lo que pudieron hacer es explicar al fogoso obrero las complicaciones de imponer la fornicación por decreto, aunque hubiera muchos dispuestos a someterse al imperio de la ley-