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González: "Aznar quiere controlar todos los sectores"

"Tratan de engañar a Bruselas una vez más" - "Hay un problema serio con la justicia" - "No tengo ningún problema en ir al Supremo" - "Telefónica responde a lo que dicen desde Moncloa"

Felipe González acusó ayer al Gobierno que preside José María Aznar de intentar perpetuarse en el poder mediante un nuevo caciquismo basado no ya en la compra directa de los votos como durante la restauración canovista, sino en el control absoluto de todos los sectores estratégicos que condicionan la opinión pública. En una entrevista concedida a la cadena SER, el ex presidente del Ejecutivo socialista sostuvo que la intención del Partido Popular es "crear grandes monopolios o duopolios en telecomunicaciones, en el mundo financiero, en el sector energético y, sobre todo, en los medios de comunicación". También advirtió que "tratan de engañar a Bruselas una vez más" con una modificación de la Ley de Televisión Digital que no altera su objetivo final.

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Felipe González estableció ayer cierto paralelismo entre la estrategia del PP en su pretensión de perpetuarse en el poder y el caciquismo de la Restauración canovista, ejemplificado en el conde de Romanones, para advertir del peligro que corren las libertades. "Lo que Romanones hacía", dijo el líder socialista, "era comprar votos directamente. Eso ya no se lleva. Ahora lo que hay que hacer es controlar sectores que puedan condicionar la opinión pública. Pues bien, eso es lo que [José María Aznar] está haciendo con las privatizaciones, con la de Telefónica y las demás"."Vamos a ver", advirtió González -ironizó con que, a pesar de su gran experiencia, ahora es cuando le están enseñando "lo que es la política químicamente pura"-, "cómo se construyen monopolios o duopolios en telecomunicaciones, en el mundo financiero, en el sector energético y, sobre todo, en los medios de comunicación", un campo al que el Gobierno "da prioridad porque toda su política, está enfocada a la imagen del día a día".

"En muy poco tiempo", prosiguió, "viviremos un control absoluto de todos esos sectores, naturalmente con un discurso de liberalización en favor de los consumidores, que verán cómo suben todos los productos, el teléfono, el tabaco.... a costa de ella". "Hay muchas ciudades en Estados Unidos", agregó, "que tienen como prestación gratuita las llamadas urbanas mientras que aquí han subido un treinta y pico por ciento".

"Yo les ruego [a Aznar y su Gabinete] que no nos consideren tontos ni pretendan que nos creamos que no se han enterado de la subida del precio del tabaco [en referencia al vicepresidente segundo y ministro de Hacienda, Rodrigo Rato] o que digan ahora que el problema de Telefónica con sus vías digitales y sus historias es un problema de una empresa privada", manifestó González.

"Mi paquete de acciones, por fortuna, es el de las libertades", declaró, "y ni va a la Bolsa ni se compra ni se vende. Si las empresas terminan poniéndose de acuerdo, pactando o no, ése no es mi problema. Pero yo, desde luego, no pacto en materia de libertades. No cedo ni una. Y se está produciendo un escandaloso abuso de poder que tiene vanas ramificaciones".

"Me preocupa", continuó, "que se instrumentalice a Telefónica, que tiene compromisos internacionales muy importantes y muchos accionistas -todos los paquetes de matildes- y que no está respondiendo a lo que dicen éstos, sino a lo que dicen desde Moncloa". En este sentido, insistió en que la entrada de la compañía en Antena 3 fue una decisión impuesta y en que "también intenta quedarse con la Cope, aunque [el Gobierno] ya la tiene a su disposición porque los obispos se la ponen, al igual que con Onda Cero". "Además", añadió, "hay una agresión contra Tele 5 para ver dónde queda el asunto".

González aludió asimismo a la "escandalosa" modificación de la Ley de Televisión Digital ante las presiones de la Comisión Europea para denunciar que, como reconoció ayer el ministro de Fomento, Rafael Arias-Salgado, en una entrevista en el periódico La Vanguardia -"los descodificadores deberán ser abiertos y compatibles"-, no altera su finalidad.

"Rectifican a contrario de lo que decían hace mes y medio", recordó; "decían que irían a los tribunales porque Bruselas no tenía razón, pero su propósito sigue siendo el mismo. Lo que antes hacía el Gobierno lo hará ahora una comisión que ellos van a controlar. Se trata de engañar a Bruselas una vez más. Por tanto, pasamos por una doble humillación: la rectificación de lo que antes parecía impecable y un engaño que, ya lo anticipo, va a producir una profunda irritación en los medios europeos porque, claro, no han nacido ayer".

"Les da lo mismo si la imagen de España se deteriora", concluyó González no sin destacar que se equivocan "al creer que el fútbol es un gran factor de manipulación", pues la inmensa mayoría de los aficionados a este deporte "no son ciegos".

ANGUITA.

"Creo que está en pleno proceso de autopsicoanálisis". En esos términos se refirió González a Julio Anguita, el coordinador general de Izquierda Unida, al que acusó de vender una imagen de integridad al tiempo que apoya la política de derechas del Gobierno y de actuar a veces al dictado del director del diario El Mundo, Pedro J. Ramírez, y del abogado Antonio García Trevijano.Según González Anguita "está haciendo un papel que es perfecto para el Gobierno y que, claro, él lo enreda". Ese rol "no lo empezó ayer, aunque algunos se den cuenta tarde" , y consiste "en que su 'discurso sea aparentemente radical, incluso aparentemente honesto, digno, al ser de izquierdas, para después hacer lo que dicen Pedro J. y Trevijano"."Cuando le conviene al Gobierno", dijo González, "y con un discurso radical naturalmente, vota con él o va a Galicia a ayudar a [Manuel] Fraga", en alusión a la escisión que Anguita ha provocado en sus propias filas en esa comunidad a raíz de que su líder, Anxo Guerreiro, hubiese llegado a un acuerdo con los socialistas para tratar de desbancar conjuntamente de la presidencia de la Xunta al veterano dirigente popular. "Después", apuntó, "irá a Cataluña o a Madrid y siempre ayudará a la derecha".

González terminó advirtiendo a Anguita: "Cuidado, que no se confunda. Como haga un discurso en el que se note que su intención es ayudarla, ya no le servirá a la derecha".

OPOSICIÓN.

"Siempre es mejor tener un monstruo con dos cabezas que un monstruo con un marmolillo por cabeza", comentó González sobre las críticas del PP al PSOE en esa línea. Por otra parte, aseguró, que los socialistas no están siendo "lo suficientemente duros" en la oposición, pero que tampoco van a practicar la que ellos sufrieron, "de absoluta irresponsabilidad y sin límites". "Nuestro estilo", sentenció, "no es el de ir a degüello".

JUSTICIA.

"Creo" dijo Gonzalez, que hay un problema con la Justicia muy serio, que estamos entrando en una crisis modelo italiano. Pero lo dramático es que se niegue [su existencia] por el Gobierno, que se ningunee cuando se plantea un conflicto como el de los fiscales". Sobre la presunta conspiración contra PRISA desvelada por el juez Baltasar Garzón, González advirtió que conoció la primera operación contra EL PAÍS, hace 20 años: "La montó Trevijano".

FILESA.

González aseguró que el próximo día 22 acudirá a declarar ante el Tribunal Supremo como testigo en el caso de la supuesta financiación irregular del PSOE: "No creo que tenga el privilegio, ni lo reclamo, de hacerlo por escrito. Acudiré. No tengo ningún problema. Sé que hay gente que durante años está persiguiendo mi foto subiendo unas escaleras determinadas. La persiguen [la foto] para muchos. Pero yo no tengo ningún inconveniente. Las subiré con la dignidad de sentirme tranquilo".

TERRORISMO.

González alegó que, en público, no quiere hacer ningún comentario sobre la lucha antiterrorista, pero reconoció que le preocupa la situación actual: "ETA sigue siendo lo que era y yo no conozco, porque creo que no existe, una estrategia antiterrorista". Respecto a la polémica suscitada, en torno al homenaje a Miguel Ángel Blanco, el concejal del PP asesinado en julio por esa banda criminal, adujo que no le pareció oportuno.

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