Un gol para Darjaene
Seedorf marcó un tanto desde 40 metros dedicado a su primera hija
Clarence Seedorf abandonó precipitadamente Madrid. Faltaban tan sólo 24 horas para el derby, pero aún así Jupp Heynckes le dio permiso para ausentarse. Todos sus compañeros estaban en el secreto pero él había pedido privacidad. No quería que el asunto se convirtiera en un artículo más de consumo de la prensa del corazón. Pero ayer, contagiado con el ambiente festivo del derby, desveló el porqué de su marcha a Holanda. Seedorf, de 21 años, había sido padre por primera vez de una niña, Darjaene. Para ella es el gol que su padre marcó ayer en el Bernabéu."Cogí el balón, me di media vuelta, creo que estaba unos 15 metros dentro de su campo. Miré a la izquierda, intentando hacer creer que iba a pasar el balón pero en realidad lo tenía muy claro, iba a disparar a puerta. Vi que Molina, como es su costumbre, estaba bastante adelantado así que me dispuse a lanzar lo más fuerte posible. Tuve mucha suerte y el balón entró". Entonces Seedorf arqueó sus brazos y los movió en un gesto como si acunase un bebé. Era el gol de Darjaene.
Seedorf ha encontrado el camino hacia el gol. Ya lo adelantó después del partido de la Supercopa en el Bernabéu cuando marcó uno de los cuatro goles logrados por el Madrid. Ayer consiguió el del empate. "Todas las temporadas me marco un reto especial, en ésta quiero intentar marcar. No soy un goleador, no soy ni Suker ni Ronaldo, pero esto . o de que puedo hacer y convencido de que puedo hacer goles. Cuando era juvenil en Holanda marqué muchos y siempre he pensado que cuando has hecho algo de joven siempre sale años después. No me atrevo a decir que puedo lograr 20 goles pero sí pienso que mi meta. estará cercana a los 10".
El jugador holandés, a pesar de la contundencia de su tanto, se mostró más satisfecho por el espíritu de sacrificio que demostró su equipo en la segunda parte, una de las herencias de la era Capello, de la que él es discípulo aventajado. "Si seguimos presionando, actuando como un equipo, como lo hicimos el año pasado estoy convencido de que vamos a llegar lejos".
Molina recibió el trallazo de Seedorf sin poder hacer apenas nada. "Vi cómo Seedorf cogía el balón y enseguida pensé que iba a tirar. He visto al Madrid la pasada temporada tirar muchas veces desde esa distancia. Lo ha hecho Seedorf pero también acostumbra a hacerlo Panucci. Es una de sus jugadas. Pero aunque lo vi, no pude hacer nada, yo estaba algo adelantado y el balón entró en la portería con mucha fuerza".
En el momento en que el balón de Seedorf llegaba a la meta del Atlético, en la banda se solicitaba el cambio de Suker por Amavisca. Hubo momentos de confusión y algunos jugadores que en esos instantes estaban en el terreno de juego sospecharon que Molina estaba más pendiente de lo que sucedía fuera del campo que allí. "No, las cosas cómo son, ni me fijé en que iban a cambiar a Suker. Eso son excusas. Yo vi a Seedorf cómo cogía el balón y se preparaba a lanzar con toda la intención. Es absurdo decir otra cosa".
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