Almunia pone límites al consenso con el PP y excluye de él la educación y la sanidad
El secretario general del PSOE, Joaquín Almunia, delimitó ayer el campo del consenso político. En su criterio, debe mantenerse en cuestiones como el terrorismo, la política exterior o la construcción del Estado autonómico, pero no tiene por qué alcanzar asuntos como la sanidad o la educación, en los que los partidos ofrecen soluciones diferentes.Sin embargo, Almunia aseguró que el grado de consenso alcanzado sobre una futura ley de financiación de partidos al que por la noche se refirió José María Aznar en Quintanilla de Onésimo- es muy alto y consideró "urgente" que se apruebe la ley y que "todos" la cumplan, pero recordó que el PSOE sigue discrepando con el PP sobre su pretensión de que las personas jurídicas, es decir las empresas, puedan hacer aportaciones a las formaciones políticas. Almunia comentó que el PP espera más que ellos de los empresarios. "Mezclar el dinero de los partidos con el de las cuentas de resultados es muy peligroso", matizó.
Almunia ofreció ayer una conferencia de prensa en la sede de su partido, tras mantener una reunión con la Comisión Permanente de la Ejecutiva socialista, en la que acusó al Gobierno de Aznar de "abandonar toda esperanza de tener una política autonómica".
El líder socialista advirtió al Ejecutivo sobre la voracidad insaciable de sus socios nacionalistas a la hora de pedir "más allá de lo mucho que el Gobierno ya les ha dado en competencias y financiación", por lo que, al Comienzo del año político, se encontrará con que sus socios, lejos de estar satisfechos con lo que ya han recibido, le siguen presentando pliegos con nuevas peticiones", algunas de gran calado, "como la de CiU para que vayan pensando un nuevo sistema de financiación para Cataluña". Almunia fue tajante:
"El Gobierno está haciendo concesiones que no suman un proyecto. No se puede construir el Estado de las autonomías sin un modelo de financiación pactado y racional".
Almunia aseguró que su partido está preocupado por lo que llamó "calidad de nuestra vida democrática" y mostró su satisfacción ante el hecho de que el Gobierno haya anunciado que "da marcha atrás en sus aventuras digitales", en referencia a la modificación legal exigida por la Unión Europea. Almunia dijo que "cuanto antes lo hagan, mejor", y que ellos aplaudirán si se aprueba un decreto-ley en el Consejo de Ministros de esta misma semana "no sólo para estar de acuerdo con las normas comunitarias, sino por cumplir la Constitución española".
El secretario general socialista mostró su preocupación por la situación de los inmigrantes en Ceuta y Melilla. En su opinión, es muy grave. Así, exigió al Gobierno que se "respeten los derechos humanos" de cualquier residente, aunque sea ilegal, en territorio español.
Almunia volvió a mostrar su oposición radical a la rebaja de la edad penal de los 18 a los 16 años para delitos relacionados con el terrorismo y, tras reafirmar su apoyo al Gobierno en esta materia, aseguró que su partido no puede avalar medidas tan claramente anticonstitucionales".
Preparar las munícipales
También anunció Almunia que el PSOE empezará a trabajar de inmediato para preparar las elecciones municipales de 1999, de forma que la campaña no sea "un hecho efímero", y expuso la necesidad de reforzar las competencias y la financiación de los ayuntamientos, especialmente los de las medianas y las grandes poblaciones.
A una pregunta sobre los llamados submarinos del PSOE en IU y la posibilidad de acogerlos de ser excluidos por Julio Anguita, Almunia aseguró que desea que se resuelvan cuanto antes los problemas. "Al no poder ayudar desde fuera, lo más que puedo hacer", dijo, "es callarme y no opinar sobre la crisis". Sin embargo, ironizó: "El PSOE no tiene Marina y, por tanto, carece de submarinos. Estamos desmilitarizados".
