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El regreso del genio

Romario asombra con el trato cómplice de Valdano

EI día que Romario se acueste temprano por las noches como un buen chico, vaya el primero en las carreras de entrenamiento y luche en los partidos hasta el último minuto, no será Romario. El día en que a Romario se le prive de la posibilidad de relajarse con el futvoley o en las discotecas de la playa y se le pida, además, que presione la salida de los defensores, ese día Romario se convertirá en un futbolista vulgar, como le ocurrió el pasado año.En caso contrario, Romario volverá a ser Romario, "el mejor del mundo", en la autorizada opinión de Ronaldo. "Es mejor que yo", declaró ayer el ex jugador del Barça a la prensa italiana. Estamos otra vez ante un delantero genial, explosivo en los últimos metros, letal. Así lo ha entendido el técnico del Valencia, Jorge Valdano, que le ha dispuesto un tratamiento individualizado para que, pueda volver por sus fueros. El plan consiste, entre otras cosas, en lo siguiente: carrera continua, la justa; pues no es favorable para su menudo cuerpo, que reclama en cambio una sobredosis de velocidad y potencia; el trabajo sobre, arena de la playa y las ejercicios en la bicicleta estática también le vienen bien al organismo, según desveló el propio Valdano, que, se preocupó de telefonear al preparador físico que trataba a Romario en Brasil.

Mestalla disfruta

Por, fin el Valencia empieza: a disfrutar del brasileño. En dos partidos en Mestalla, el delantero, de 31 años, ha entusiasmado a la hinchada y ha impresionado a sus compañeros. "Es un jugador fabuloso", comenta con entusiasmo juvenil el novato lateral izquierdo Juanfran, "yo lo había visto por la tele, pero verlo de cerca te impresiona todavía más: toca cinco veces el balón y mete tres goles, es increíble". Romario ha perdido cuatro kilos respecto al año pasado, se encuentra afilado, rápido, felino. Coloca el cuerpo en esa posición oblicua tan característica suya, despega con el balón en los pies y no hay defensa que lo alcance. "Romario va a entrenarse cuando yo diga. Cuando le vean mal físicamente, pregúntenme por él. Pero, entretanto, disfrutemos del artista", comentó Valdano tras el partido del miércoles ante el Palmeiras, en el que Romario marcó tres goles después de no haberse entrenado por la, mañana con sus compañeros.

Pero además de la preparación física, el técnico también le

dispensa a Romario un preferencial tratamiento anímico. Le hace sentirse importante, el centro de todo el juego del Valencia. En uno de los choques amistosos le cedió incluso la capitanía. Y el delantero carioca le ha respondido con una motivación- extraordinaria. "Quiero ser Pichichi de la Liga, ganar algún título y llegar al Mundial de Francia como mejor jugador del mundo", son los tres retos que se ha impuesto Romario.

Mientras Romario rinda como lo hace, poco importará: su vida privada. Al revés: será conveniente buscarle la discoteca adecuada, el campo de futvoley más entretenido y concederle todas los descansos del mundo- "A mí me da igual lo que haga. Si en los partidos juega como hasta ahora...", añade el joven Juanfran.

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