DE RICOS RUSOS A NOBLES BRITÁNICOS
Hay muchos rusos que, literalmente, pasan hambre, y todavía más que no se levantan ningún día sin verse obligados a emprender una dura lucha por la supervivencia. Pero, en este país de desigualdades flagrantes, no escasean tampoco quienes, en pocos años, han amasado fortunas de vértigo. Algunos de estos nuevos ricos están empleando su dinero en comprarse un pedigrí nobiliario y pasar a formar parte de la aristocracia, preferentemente de la británica. David Devorkin, por ejemplo, tiene ya preparados los 50.000 dólares (unos ocho millones de pesetas) con los que se convertirá en noble. "No es cuestión de dinero", afirma, "sino de que quiero que mis hijos estudien en Inglaterra, y creo que les será más fácil si son condes o duques". Según Roman Skarisov, que asegura tener el monopolio en Rusia de este peculiar comercio, todo un señor diputado ha pagado 175.000 dólares por entrar en el olimpo de la sangre azul, aunque ésta sea de pacotilla. Eso sí, lo mantiene en secreto para evitar el pitorreo de sus compañeros de la Duma. James Brown, director de investigación de la Sociedad Nobiliaria de la Gran Bretaña, dice que tiene ya a cinco rusos en sus listas y que, en teoría, pueden incluso usar los correspondientes escudos de armas, aunque debe autorizarlo la reina Isabel II. Lo que está totalmente descartado, sin embargo, es que puedan entrar en la Cámara de los Lores.-
