Destituidos los cargos de HB en cinco ayuntamientos vizcaínos

Los alcaldes del PNV en cinco ayuntamientos vizcaínos destituyeron ayer de las responsabilidades de gobierno que ocupaban a los concejales de HB para cumplir los acuerdos de la Mesa de Ajuria Enea, en los que se instaba a la coalición abertzale radical a condenar el asesinato de Miguel Ángel Blanco. En Barakaldo, la segunda mayor población de Vizcaya, y en Rentería, la tercera de Guipúzcoa, los ediles de los partidos del Pacto impidieron que HB presentase sendas mociones de condena sobre la muerte en la cárcel de Albacete del preso etarra Juan Carlos Hernando.Cinco pequeños municipios de Vizcaya -Mallabia, Mendexa, Larrabetzu, Gamiz-Fika y Berriz-, que en conjunto suman unos 8.000 habitantes, ya no tienen ediles de HB en sus equipos de gobierno. Sus alcaldes, todos ellos del PNV, les destituyeron ayer para hacer efectiva la política de no colaboración con la coalición si no condena el asesinato del edil del PP en Ermua.

Los concejales socialistas, peneuvistas, populares y de IU-EB de Barakaldo -el segundo mayor municipio de Vizcaya, con más de 102.000 vecinos- abandonaron ayer en bloque el salón de plenos municipal cuando se iba a tratar una moción de condena presentada por HB sobre el fallecimiento del recluso de la organización terrorista. La moción, que ni siquiera fue leída, era el último punto del orden del día.

En Rentería, el tercer mayor municipio de Guipúzcoa, con más de 41.000 habitantes, el Ayuntamiento rechazó también en un pleno extraordinario la moción de HB y aprobó una propuesta alternativa firmada por los ediles del PSE-EE, PNV y EA que expresa la condolencia de la corporación a la familia de Juan Carlos Hernando, solicita a las autoridades el esclarecimiento de los hechos ocurridos en la cárcel de Albacete- este punto fue rechazado, por diferentes motivos, por el PP y HB- y afirma: "Sólo a través de la voluntad mayoritaria de nuestro pueblo conseguiremos una sociedad vasca en paz, capaz de erradicar definitivamente las dramáticas consecuencias de la violencia", apartado que HB no votó.

En Bergara, municipio guipuzcoano de 15.500 habitantes, los ediles de HB exigieron al alcalde, el peneuvista Victoriano Gallastegi, que expulsase del salón de plenos a los periodistas presentes, reclamación que el primer edil rechazó. La moción de HB en apoyo del preso muerto fue rechazada por la mayoría del tripartito.