Gemma Nierga será la nueva protagonista de las tardes de la SER

Una boda en segundas nupcias, o más bien la unión de otra pareja de hecho, pero con el primer novio presente. "Gemma Nierga, ¿acepta usted dirigir La ventana la próxima temporada?", le preguntó Daniel Gavela, director de la SER a la periodista. "Sí, acepto", contestó Nierga. La ceremonia tuvo lugar en El Escorial, en presencia del primer novio del programa, Javier Sardá; testigos de prestigio como Iñaki Gabilondo, José Ramón de la Morena y Fernando G. Delgado, y un centenar de invitados, estudiantes al curso que inauguro ayer la cadena SER en la Universidad de Verano de la localidad madrileña.

"Siento miedo y alegría", confesó luego Gemma Nierga (nacida en Gerona hace 31 años), hasta ahora directora del programa nocturno de la SER Hablar por hablar y presentadora de un talk-show en Telemadrid.. "Supone el mayor reto profesional que he asumido en mi carrera", añadió Nierga, quien dedicará el verano al estudio de su irrupción en las tardes de la radio a partir del 1 de septiembre El programa Hablar por hablar de hoy será el último que realice Nierga, que también abandonará la televisión para dedicarse "en cuerpo y alma a La ventana".Javier Sardá, hasta ahora responsable de La ventana, que comienza en otoño su andadura televisiva en Tele 5 con un programa nocturno, aseguró que "siempre tendrá un pie en la SER", cadena en la que dejará a su colaborador más íntimo: el señor Casamajor.

Nierga y Sardá compartieron con sus compañeros de la SER un encuentro sobre La radio de autor. Cada uno ofreció sus trucos o sus sensibilidades, pero todos coincidieron en que la radio debe tener un compromiso con la sociedad y aceptar. que hay límites. "Se habla mucho de telebasura, pero hay más, radiobasura. Esto es más grave, porque la radio está más enraizada en los contenidos informativos y hay muchas radios que faltan a la verdad conscientemente", dijo Sardá.

Gabilondo, el director de Hoy por hoy, el programa líder de las mañanas de la radio, ofreció un truco, aparentemente sencillo, pero que tiene muchas dosis de magia y de años de profesión rigurosa: la importancia de tener plena consciencia del oyente. "Todos los que hacen radio lo saben, pero pocos se acuerdan de que la razón, el destino y el sentido está en' el oyente. Esa consciencia no aprende por el solo hecho de saberlo", aseguró Gabilondo. Sardá prefirió el símil del portero de fútbol. "Yo prefiero, parar goles que marcarlos. Me preocupa más la tónica del programa que la prisa o la inmediatez", dijo Sardá, cuya obsesión es imaginarse que todos los días tiene que hacer su primer programa.

El tipo de programa nocturno que hasta ahora ha dirigido Nierga y en el que son los oyentes los que van planteando sus temas, ha ayudado a. la periodista a mantener la distancia y ser objetiva, "sin censuras, ni opiniones". "Ha sido en Hablar por hablar. donde he aprendido a amar la radió. Ahora me ha salido un nuevo novio [La ventana]", afirmó Gemma Nierga.

Mientras, José Ramón de la Morena, director del programa deportivo El larguero, recomendaba a los estudiantes "escuchar mucha radio", y Fernando G. Delgado, responsable del espacio de fin de semana A vivir que son dos días, reflexionó sobre la "administración del silencio".