Detenido el magnate japonés Kitaro Watanabe por desviar fondos
La policía japonesa detuvo ayer a Kitaro Watanabe, presidente de una de las más poderosas inmobiliarias de Japón y considerado uno de los 10 hombres con mayor fortuna personal del mundo, sobre el que pesa una acusación por ocultación de bienes para evitar el pago a sus múltiples acreedores.Tras una entrada y registro en la sede central de Azabu Building en Tokio, la fiscalía presentó orden de arresto contra Watanabe, de 63 años, y dos altos directivos de la inmobiliaria, Katsumi Naganuma y Soichi Owaki, responsables de la contabilidad de la firma.
Según la investigación, entre septiembre de 1994 y diciembre de 1995 los detenidos canalizaron 1.300 millones de yenes (unos 1.625 millones de pesetas) desde la cuenta bancaria de la empresa a una cuenta paralela y borraron en los libros de contabilidad todo rastro sobre la procedencia y destino del dinero.
La fiscalía japonesa estima que parte de esta suma fue a engrosar el patrimonio personal de Watanabe, quien puede enfrentarse a una condena de un máximo de dos años de prisión y 500.000 yenes (unas 625.000 pesetas) de multa.
Azabu Building disfrutó, junto con otras grandes inmobiliarias japonesas, de multimillonarios beneficios durante los años de la "burbuja económica", a finales de los ochenta, en el marco de una vertiginosa carrera inflacionista. También en el mercado de valores Azabu era conocida por realizar espectaculares operaciones bursátiles de alto riesgo.
En estas épocas de bonanza, inmobiliarias como Azabu amasaron enormes fortunas. En 1990, la revista estadounidense Fortune estimaba el patrimonio personal de Watanabe en 1,38 billones de yenes (más de 1,7 billones de pesetas), lo que le situaba en el sexto lugar de la clasificación de riqueza mundial.
La ruptura de la "burbuja"
económica y el desplome de los precios del suelo y las acciones desencadenó la quiebra de numerosas empresas y cambió de signo los balances de Azabu, que acumuló multimillonarios créditos hoy considerados irrecuperables. Se estima que la firma tiene un pasivo equivalente a 750.000 millones de pesetas.
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