_
_
_
_

Mauricio Anglés piensa que Ricart miente, pero no le cree capaz de matar a las niñas

Sara Velert

Mauricio Anglés afirmó ayer en el juicio por el triple crimen de Alcàsser que cree que el acusado Miguel Ricart "sabe algo", porque "se ha visto que ha mentido mucho, y si una persona miente es que algo esconde". El testigo, sin embargo, no considera al procesado capaz de cometer las atrocidades a las fueron sometidas las tres niñas asesinadas. Ricart le soltó un improperio. La ex compañera de Ricart, María Dolores Cuadrado, que también testificó ayer, confirmó que los dos pasearon a su hija el día después de la desaparición de las víctimas.

María Dolores Cuadrado dijo desconocer dónde pasó Ricart la noche del 13 de noviembre de 1993, cuando fueron secuestradas Míriam García, Antonia Gómez y Desirée Hernández. El acusado sostiene que esa noche estuvo en casa de su amigo Antón Partera Zafra, donde también se hospedó toda esa semana. La testigo afirmó que no sabía dónde vivía Ricart por aquella fechas.La convivencia entre María Dolores Cuadrado y Miguel Ricart terminó en junio de 1991, ocho meses después de nacer la hija de ambos. A partir de ese momento se vieron "esporádicamente", afirmó la testigo, quien con ayuda de su agenda ratificó que cenó con Ricart, Kelly y Mauricio Anglés el 6 de noviembre de 1992. Con ello apoyó el relato del procesado frente al de Mauricio Anglés, que reiteró ayer mismo que esa cena se produjo en otras fechas.

María Dolores, que se mostró serena y relajada, también confirmó el paseo familiar del 14 de noviembre de 1992. "Hoy ha venido Miguel y hemos ido a pasear con Rosa [su hija]", dice la agenda. La ex compañera de Ricart no notó nada extraño" durante el paseo.

Como a otros testigos, le fueron mostradas varias prendas encontradas el 27 de enero de 1993 en la fosa de La Romana (Tous), donde fueron hallados los cadáveres de las niñas. María Dolores no reconoció la ropa que Neusa Martíns, madre de los hermanos Anglés, afirma que solía llevar el procesado. Una de las acusaciones quiso saber entonces si seguía el juicio a través de los medios de comunicación y si conocía las respuestas de otros testigos. María Dolores respondió afirmativamente, pero añadió que no había visto las prendas.

Las declaraciones de la testigo dieron un respiro a Ricart al fina de una larga sesión en la que se interrogó de nuevo a Mauricio Anglés. El hermano del fugitivo Antonio Anglés reiteró que las imputaciones de Ricart contra él son falsas. Preguntado sobre dónde pasó la noche de la desaparición de las niñas, Mauricio respondió: "No lo sé; drogándome o robando por ahí".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Sara Velert
Redactora de Internacional. Trabaja en EL PAÍS desde 1993, donde ha pasado también por la sección de Última Hora y ha cubierto en Valencia la información municipal, de medio ambiente y tribunales. Es licenciada en Geografía e Historia y Máster de Periodismo UAM-EL PAÍS, de cuya escuela ha sido profesora de redacción.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_