Laberinto de denuncias

El escándalo de sexo y drogas que envuelve a la selección portuguesa de fútbol se saldó ayer con un laberinto de denuncias ante los tribunales entre acusados y acusadores. La Federación Portuguesa de Fútbol anunció la presentación de una querella criminal contra los responsables del programa (que destapó con nombres y datos la bacanal) por "falsas declaraciones" como el consumo de estupefacientes. El presidente del Oporto, Jorge Pinto da Costa, (al que pertenecían los acusados hasta ahora) amenazó con revelar historias íntimas de jugadores de otros equipos, así como de responsables de la cadena privada SIC. Pinto da Costa, considerado en Portugal como el gran ,capo del fútbol luso, no ha tardado en reaccionar al escándalo que sólo involucra a los jugado res de la selección que militan o militaban en el Oporto. El presidente del club afirmó ayer que está dispuesto a revelar nombres y datos de jugadores y periodistas envueltos en situaciones semejantes a la denunciada por la cadena SIC. Pinto da Costa considera que las in formaciones vertidas en el programa Los dueños de la pelota son otra de las habituales maniobras y confabulaciones" contra la entidad y prometió destapar un gran escándalo que afectará a responsables de la cadena televisiva. Para ello cuenta con unas presuntas in formaciones del representante de jugadores, Manuel Barbosa, (lleva también a Secretario, uno de los acusados que ayer negó toda participación en esos hechos).

Por su parte, la cadena SIC ha anunciado la presentación de tres denuncias por difamación contra el Oporto, su presidente y el médico de club, José Carlos Esteves, quien acusó al canal de "tentativa de homicidio por vía audiovisual". Esteves considera que existe una relación directa entre las informaciones del programa y el amago de infarto que sufrió el entonces seleccionador nacional y hoy entrenador del Oporto, Antonio Oliveira, ya dado de alta.

Precisamente, el Sindicato de Jueadores explicó ayer que "es teóricamente posible que las informaciones periodísticas pudieran arrastrar una muerte y, como mínimo, deberían pensar dos veces antes de lanzar esas acusaciones". El sindicato anunció la suspensión de sus relaciones con la cadena y exige una "rigurosa investigación" por parte de la federación para llevar el asunto hasta sus últimas consecuencias". No obstante, el mencionado sindicato añade que está dispuesto a modificar su actitud si se demuestran con pruebas fehacientes las acusaciones vertidas contra los jugadores. El Oporto anunció igualmente que presentará una demanda judicial contra la cadena SIC a la que solicitará "una pesada indemnización".Por otro lado, Sa Pinto no podrá volver a jugar con la selección portuguesa hasta después del Mundial 98. Así lo decidió ayer la federación por su agresión a Artur Jorge, el seleccionador.