PASAR POR EL ANILLO
Los miembros del Ejército holandés, ellos y ellas, se han ganado el derecho al bodypiercing libre, o sea, a decorar su cuerpo con cuantos agujeros quieran y donde más les guste siempre que no sean muy visibles. El asunto lo peleó hasta el final una soldado que acostumbra a llevar en la lengua un anillo colgado. Su capitán, que no se andaba por las ramas, le comunicó que cuando estuviera de servicio debería quitarse el adorno en cuestión salvo que quisiera que él mismo se lo arrancara. Pero el superior jerárquico no contaba con que no existe ninguna norma legal en la que apoyar su exigencia. La ley establece que los miembros del Ejército holandés no pueden llevar "joyas visibles en la cabeza", pero no establece nada sobre si dentro de la cabeza, según el sindicato militar que representó a la mujer. Tras largas discusiones, el portavoz del Ministerio de Defensa, el teniente coronel Hans Hardenbol, ha dado el caso por cerrado y admitido que los adornos en la lengua no entran dentro de la prohibición.-
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