El accidente de un Talgo suma dos víctímas a la tragedia de Navarra
El descarrilamiento del Talgo que cubre la línea Barcelona-Málaga en Azuqueca de Henares (Guadalajara) en la madrugada de ayer sumó dos nuevos muertos a los 18 con los que finalmente se cerró la lista oficial de fallecidos tras el accidente sufrido en la tarde del lunes por el Intercity Barcelona-Irún a su paso por la localidad navarra de Uharte-Arakil. Aunque las investigaciones no están cerradas y, por lo tanto, las causas no son oficiales, en los dos casos se apunta como la más probable un exceso de velocidad en ambos convoyes.
En el accidente de Uharte parece confirmado que el tren circulaba a 137 kilómetros por hora, cuando el cambio de vía obligaba a circular en ese tramo a 30 kilómetros. Nadie en Renfe ha explicado por qué el maquinista no redujo la velocidad y por qué se determinó que el cambio de vía se efectuara en esa estación y no en la cercana de Etxarri-Aranatz, como era habitual.Lo que se sabe es que la línea Barcelona-Irún carece de sistemas de seguridad ya implantados en otros trayectos y que reducen automáticamente la velocidad de los trenes de acuerdo con las señales de las vías. La juez que investiga el caso ha ordenado un análisis de sangre del maquinista. Tras la confusión inicial, ayer se fijó el número de muertos en 18. Cuarenta y ocho personas resultaron heridas, 12 de ellas graves.
Nueve horas después de este siniestro, un tren talgo en la ruta Barcelona-Madrid-Málaga descarrilaba en la estación de Azuqueca, en la provincia de Guadalajara, causando la muerte a dos personas y heridas a 25, dos de ellas graves. Uno de los heridos es el maquinista del tren. Los fallecidos son un empleado de la compañía de coches-cama y una pasajera de nacionalidad francesa.
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Editorial en la página 10
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