Olazábal, el cauteloso

Después de una grave lesión en los pies que estuvo a punto de apartarle del golf para siempre, José María Olazábal, de 31 años, se recupera vertiginosamente de su artritis reumática. Tras dieciocho meses de inactividad, el vencedor del Masters 1994 confía en su plena recuperación: "Aún tengo molestias, pero van disminuyendo poco a poco y tengo esperanzas de recuperarme completa mente". El propio Olazábal aún no da crédito a su sorpredente mejoría: "El torneo de Dubai fue la primera prueba para estudiar mis posibilidades futuras y el Open de Portugal ha sido una segunda prueba, un buen rodaje para viajar dentro de dos semanas al torneo de Nueva Orleans y presentarme después al Masters de Augusta". Su favorable evolución parece haberle inyectado nuevos ánimos cuando hace unos meses no conseguía subir unas escaleras sin ayudarse de las barandillas o tenía serias dificultades paria moverse en su propio domicilio. "`Soy muy optimista", dice, "porque cuando volví a jugar no podía soportar los dolores. Ahora se han ido aliviando y creo que he mejorado mucho, pero todavía necesito descanso". A pesar de sus actuales condiciones físicas Olazábal igualó el pasado sábado el récord del campo de Aroeiras con 65 golpes (siete bajo par) y disputó la victoria al sueco Jonzon, quien finalmente ganó el torneo en un día desafortunado para el español."Ha sido muy bueno volver a la competición", dice Olazábal, "eché mucho de menos el golf porque adoro este deporte y sentí mucho su falta. Hoy he tenido un día malo y he fallado varios golpes, pero confío en alcanzar muy pronto un buen nivel en las competiciones". Los resultados de su rodaje son más que optimistas, aunque Olazábal no quiere lanzar las campanas al vuelo y prefiere! ser cauteloso. "Estoy trabajando por alcanzar un buen nivel juego. Mi sueño es siempre hacerlo lo mejor posible, pero no debemos enloquecer y pensar ya en la victoria".

A pesar de su estado, Olazábal no perdió en ningún momento su condición de claro favorito. Después de su sorprendente jornada del sábado, el portugués Antonio Sobrinho explicó que "Olazábal es, como todo el mundo sabe, un jugador de primera línea que, a pesar de haber estado apartado de la competición durante mucho tiempo, puede alcanzar la victoria y un éxito así la devolvería la confianza necesaria para regresar arriba". Desafortunadamente no fue así, pero Txema está casi a punto para ofrecemos nuevos éxitos. El español tiene previsto visitar en los próximos días al médico alemán que, mediante técnicas "alternativas", ha conseguido el milagro de devolverle a los campos de golf.