La magia invade el Camp Nou

"No vamos a buscar excusas por este motivo". Radomir Antic, el técnico del Atlético, no quiso ampararse en las ajetreadas horas que vivió su equipo antes de disputar el encuentro. "Te vas triste cuando pierdes un partido así. Sobre todo porque el equipo ha jugado un gran fútbol, ha realizado buenas jugadas y ha ido por delante en el marcador la mayor parte del partido. Pero todo eso no ha servido de nada". Fue Antic parco en palabras. Tanto como su homónimo Bobby Robson que emocionado afirmó: "Hablen [los periodistas] con los jugadores. Mi homenaje es para ellos. Esta es su noche".El técnico británico afirmó: "Necesito tiempo para reflexionar en lo ocurrido esta noche. No recuerdo haber vivido nada igual en los 45 años que llevo en el fútbol. Creo que ofrecimos unos últimos 45 minutos de un fútbol increíble. Y pudimos incluso marcar otros dos goles".

La perplejidad se adueñó no sólo de Robson sino también de Antic, que encontró pocas explicaciones a la remontada azulgrana. "Fue un clásico partido de Copa. Cuando estuvieron por detrás en el marcador y casi sin opciones, el Barça arriesgó mucho y tuvo acierto de cara a la portería. Y eso fue determinante", dijo. Antic no perdió la flema ante algunas preguntas incluso un tanto impertinentes. "¿Dormirá bien esta noche?", le interrogaron. "Desde luego", respondió. "Llevamos una racha de buen juego que no se corresponde con los resultados. Sin embargo, en la Copa hay que esperar partidos como el de hoy. Y no debemos buscar ningún tipo de excusas". "¿Cree que el equipo estaba cansado en la segunda parte", le preguntaron. Y respondió: "No. El equipo ha sido positivo hasta el final, pero es evidente que cuando perdíamos tomamos más riesgos".

Robson reveló que en el descanso no tuvo más remedio que decir a sus jugadores: "Mirad la camiseta, tenéis que sacar el coraje y debemos ganar la eliminatoria y marcar cuatro goles", les dijo. "Habíamos sufrido un duro castigo por nuestros errores de la primera mitad", comentó después. "Pero cuando marcamos el primer gol en la segunda parte pudo comprobarse que todo el mundo tenía aún mucha reserva de gasolina".

Robson llegó calificar a sus jugadores de héroes por no haber cometido errores en la segunda mitad, aunque no quiso analizar la pésima actuación de Baía. El técnico dijo que quería reflexionar la noche vivida, pero descartó ordenar a partir de ahora un fútbol más de ataque y renunciar a su manual mucho más defensivo: "Tenemos 24 jugadores muy buenos. El fútbol es fútbol. Cada partido es una historia distinta. No se trata de una corrida de toros donde siempre se sabe el final en el que el toro siempre muere. El fútbol es distinto".

"Estoy jodido, claro", reconoció el portero atlético Molina. "No esperábamos perder. Nos han echado de la Copa, del Rey, pero debemos olvidarlo y centrarnos ya en el partido del sábado ante el Valencia". Iván de la Peña calificó con un 20 al público: "Hemos jugado más con el corazón que con la táctica".

Guardiola, Ronaldo y Stoichkov afirmaron que habían sacado el orgullo y dieron su apoyo a Vítor Baía que salió del campo llorando. Ronaldo dijo: "Nunca había vivido una noche igual".