Los camioneros extienden la huelga desde el norte al resto de España

La huelga de camioneros cobró ayer mayor dimensión, al extenderse al sur. Tras siete días de paro, los cortes de carreteras y el bloqueo de puertos agudizaron los problemas de abastecimiento de muchas industrias -alguna de las cuales ha parado la producción-, gasolineras y mercados. Los enfrentamientos con piquetes produjeron dos heridos y hubo 19 detenciones. Junto a las fronteras con Portugal y Francia había bloqueados, sin poder entrar en España, un millar de camiones.

La mitad sur de la Península comenzó a notar los efectos de la huelga. El paro, convocado por organizaciones minoritarias, recibió por la tarde el apoyo de Fenadismer, una de las asociaciones de mayor representación en el transporte. El bloqueo de carreteras ha obligado a interrumpir la producción en algunas grandes empresas. FASA-Renault adelantó el expediente de regulación y dejará de fabricar 1.680 coches al día. En el País Vasco están casi paralizadas la Acería Compacta de Bizkaia, Fagor Electrodomésticos y Michelin. Opel y Balay, en Aragón; Citroén, en Vigo, y Nissan, en Barcelona, anunciaron que sólo garantizan la producción hasta hoy por falta de piezas. En Galicia hay problemas para que la pesca llegue a los puestos de venta. En La Coruña no se efectuaron las subastas de pescado para fuera de la provincia, con unas pérdidas calculadas en 500 millones. En las provincias vascas y en Cantabria, numerosas gasolineras cerraron por falta de existencias. La llamada ley Corcuera estableció sanciones de hasta 100 millones para quienes interrumpan los abastecimientos o los servicios públicos.