'Superlópez' planeó 100 días antes el robo de documentos, según los fiscales
La fiscalía de Darmstadt dio a conocer ayer la acusación presentada a la Audiencia el pasado día 6 contra el ex directivo de Volkswagen (VW) José Ignacio López de Arriortúa y tres de sus colaboradoes, por apropiación indebida de secretos industriales de su anterior empresa, General Motors (GM). Según la fiscalía, López y sus colaboradores planearon apoderarse de los documentos 100 días antes de firmar con el consorcio alemán.
El plan de acción fue elaborado, siempre según la acusación fiscal, tras un encuentro de López de Arriortúa con el presidente de VW, Ferdinand Piëch, el 29 de noviembre de 1992. Tres meses y 10 días después, Superlópez y su equipo pasaban a VW. Los fiscales, no obstante, afirman no haber encontrado indicios suficientes para acusar a la compañía alemana y a sus principales responsables.Los abogados de López aseguran que la fiscalía se basa sólo en indicios, que "en parte no dicen nada y en parte no están demostrados". Se quejan de que la defensa no ha tenido oportunidad de interrogar a los testigos y advierten que la decisión definitiva la tomará el tribunal". La sala de delitos económicos de la Audiencia de Darmstadt tendrá que decidir si admite la acusación y procesa a López y sus colaboradores. La fiscalía aclaró ayer que López en este momento son personas libres.
La acusación contra López y sus colaboradores José Manuel Gutiérrez, Jorge Álvarez y Rosario Piazza consiste en apropiación indebida, delito tipificado en el artículo 246 del Código Penal alemán con una pena de hasta cinco años de cárcel, y competencia desleal. La pena máxima no puede ser en ningún caso superior a cinco años, porque todos los presuntos delitos suponen una única acción.
La actuación de la fiscalía duró tres años y medio. Se estudiaron 23.000 folios, se interrogó a 196 testigos y la transcripción de los disquetes informáticos investigados ocuparía 2,25 millones de folios. La mastodóntica actuación de los fiscales produce la impresión de que, al menos por lo que está en juego en Darmstadt, se matan pulgas a cañonazos. Sobre todo, cuando la fiscalía reconoce que no ha podido constatar daño económico para General Motors y su filial alemana, Opel.
López y sus tres colaboradores, siempre de acuerdo con la acusación fiscal, se apoderaron de documentos de GM sobre investigación, planificación, fabricación y compras, con la intención de utilizarlos para su trabajo en VW y luego destruirlos.
Entre los secretos figuraran el "Plan X" para la construcción de una innovadora fábrica de automóviles en Amorebieta (Vizcaya), de donde es natural López de Arriuortúa; datos de compras para la fabricación en Europa y diferentes listados de los costes de modelos de Opel, ahorros previstos para el año 1992 y estrategias de compras para nuevos proyectos.
Por parte de VW, las reacciones, ante la conferencia de prensa de la fiscalía inducen cada vez más a pensar que López es una especie de chivo expiatorio. El portavoz del consorcio alemán insistió en destacar el hecho de que la empresa no ha sido acusada de nada en Darmstadt.
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